Pistolero

Crítica de Melody San Luis - Fancinema

INVENCIBLE PARA LA GENTE, FRÁGIL PARA LOS CONOCIDOS

Los personajes delictivos que han respondido al pueblo siempre captan la atención. El más conocido es el caso de Robin Hood. Pero Argentina tiene su versión también de este tipo de personaje en la figura de Isidro Velázquez. Esta es la inspiración que da origen al film con estilo western Pistolero.

Durante el gobierno de Onganía, dos hermanos se hacen famosos delincuentes por salir victoriosos de cada uno de estos violentos asaltos. Isidoro es el que más resalta de los dos por el rumor de que ayuda a la gente con el dinero que toma. Con ese gesto, lo que logran es obtener la complicidad civil. Mientras que la policía los va siguiendo, ellos cuentan con el silencio de la gente de los pueblos, lo que les permite una mayor tranquilidad para moverse. La continuidad de los exitosos robos los vuelve casi una leyenda. Eso en conjunto con sus acciones solidarias les da un sentido endiosado a los personajes. Incluso se llega a decir que las balas rebotan en sus cuerpos. Durante el final del film se hace referencia a esto nuevamente en una escena en la que Isidoro parece ser inmune a las balas.

Pistolero logra buenos momentos en los que explora la tensión de los asaltos. La adrenalina y acción en los enfrentamientos policiales está muy lograda. La historia mítica que se va conformando alrededor de ellos es otro de los puntos fuertes. Pero más allá de los encuentros delictivos que relata el film hay otro aspecto que también está trabajado y quizás de ahí deviene el punto más débil de la película. La soledad en la que suele caer el personaje de Isidoro es entendida por su constante remordimiento por el pasado. Es una persona que huye de lo vivido y eso hace a su camino una incertidumbre y una búsqueda constante de respuestas por las cuales seguir viviendo.

En este camino aparece en la vida de Isidoro el amor de la mano de una maestra. La relación que mantienen delinea momentos muy distintos a la otra faceta del personaje. Se lo humaniza, pero aparecen para esto conversaciones un poco forzadas, en las que ella siempre le comenta alguna frase reveladora de su destino. Los diálogos no se dan de forma natural, las palabras no fluyen en estos momentos.

Otro de los problemas que presenta el film son las largas escenas que no suman del todo a la historia. Un ejemplo de esto es el principio de la película. Aunque luego se entiende que se presenta un escenario desolador en este tipo de western, se pierde la intensidad de la propuesta.