Perros del fin del mundo

Crítica de Victoria Duclós Sibuet - EscribiendoCine

Perros salvajes

Los perros en el imaginario popular son amigos y a veces hasta familia. Y en nuestra cotidianidad citadina discutimos sobre la adopción y la compra; la caca en la vereda; campañas de castración y videítos tiernos que encontramos en instagram. Sin embargo en el Sur, lejos y cerca al mismo tiempo, los perros son un universo en sí mismo, con sus complejidades y sobre todo con problemas salvajes.

Perros del fin del mundo (2018), es un documental dirigido por Juan Dickinson que establece un retrato sobre una amenaza que acecha a Tierra del Fuego. De cómo la irresponsable tenencia del hombre, hizo que las criaturas fueran recuperando su estado salvaje y aproximándose a los comportamientos de sus ancestros, los lobos.

La perspectiva del cine como posibilidad de conocer hace a este curioso documental una oportunidad muy única, por algo también fue declarado de interés cultural de la provincia de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atrántilo Sur. En cuanto a lo accesible, hay ciertos detalles que sortear, como lo reiterativo sobre sí mismo y el ritmo aletargado.

La presencia de mucha sangre, crudeza y muerte se apodera de la pantalla para interpelarnos una vez más y preguntarnos si es un exceso innecesario y cruel; o si es una realidad que merece ser contada por completo, sin recortes que la suavicen para el mainstream.