Permitidos

Crítica de Jorge Bernárdez - Subjetiva

EL SCREEWBALL ESTÁ VIVO Y ES ARGENTINO

Un chiste al pasar en una cena de parejas enciende el motor de historia. La idea la tira en la mesa una amiga de la protagonista y es la siguiente, existen famosos, estrellas del espectáculo o de la música, con los que se puede tener sexo estando uno en pareja sin que el encuentro pueda ser considerado una infidelidad. Cuando Camila (Lali Espósito) escucha la teoría le dice a su novio Mateo (Martin Piroyansky) que si él logra tener sexo con su permitido ella lo aplaudiría. En la escena siguiente Mateo se cruza accidentalmente con Zoe del Río (la extremadamente bella Liz Solari) y comienza una historia disparatada en la que se ponen en juego distintos conceptos de pareja, sobre la vida, sobre los medios. Para sumarle confusión a la cosa Camila se va a topar con su permitido, el actor Joaquin Campos, interpretado por Benjamin Vicuña, que se carga al hombro una auto parodia desopilante y se luce además porque uno de los mejores chistes de la película. Todo esto sin que baje en ningún momento el ritmo infernal del relato.

El quinto largometraje de Ariel Winograd (Sin hijos, Vino para robar, Mi primera boda, Cara de queso -mi primer ghetto-) tiene destino de éxito popular y la buena noticia es que las herramientas con que lo construyó son nobles y están vinculadas a lo más clásico del cine.

En los años treinta nació un género en Hollywood que se conoce como películas de re matrimonio o screewball. Son comedias alocadas, con personajes femeninos fuertes, con tramas disparatadas y que terminan generalmente con el reencuentro de la pareja protagonista. Permitidos es claramente un film que pertenece a ese género, lo homenajea y lo respeta. No es la primera vez que en la filmografía de Winograd se refleja su amor por el cine clásico o por el imaginario de ciertos grandes directores como Blake Edwards en Vino para robar. En este caso, claramente el referente es Billy Wilder.

Pero si Permitidos funciona como funciona es porque todo está en armonía y los interpretes de lo que Winograd cuenta saben de comedia tienen un ritmo envidiable para el asunto. Lali Espósito y Piroyansky son la pareja ideal y de ahí para abajo todos están bien y se lucen como corresponde a esas historias que siempre envidiamos en las que hasta el último de los personajes es interesante y tiene un mundo propio. Pasa con Pablo Rago y el médico inescrupuloso que interpreta y con Maruja Bustamante, una figura del under y del off Corrientes transformada en una fan a la que el galán que interpreta el galán Vicuña le mete una orden judicial que le prohíbe a la desquiciada acercarse a menos de quinientos metros.

Permitanse ver Permitidos, que la van a pasar bomba.

PERMITIDOS
Permitidos. Argentina, 2016.
Dirección: Ariel Winograd. Guión: Gabriel Korenfeld y Julián Loyola. Elenco: Lali Espósito, Martín Piroyansky, Liz Solari, Benjamín Vicuña, Guillermo Arengo, Anita Pauls, Gastón Cocchiarale, Maruja Bustamante, Abel Ayala, Pablo Rago.Producción: Ricardo Freixa, Joana D’Alessio y Nathalie Cabiron. Duración: 116 minutos.