Perfectos desconocidos (2018)

Crítica de Analía Maldonado - Loco x el Cine

El cineasta español Alex de la Iglesia, director de filmes como La Comunidad, Crimen Ferpecto, Perdita Durango, entre otros, vuelve a la pantalla grande con Perfectos Desconocidos, una remake de la película italiana con nombre homónimo dirigida por Paolo Genovese (Inmaduros e Incantesimo napoletano). A partir del 8 de marzo, se encontrará en la cartelera de los cines argentinos.

Un grupo de amigos comparte una cena un día especial, esa noche hay luna de sangre, un eclipse lunar que, según la mitología, enloquece a la gente.  Los anfitriones de la velada son Eva, interpretada por Belén Rueda (Séptimo, El orfanato y Mar Adentro) y Alfonso (Eduard Fernández, actor de Truman y La piel que habito), que recibirán a los recién casados Eduardo y Blanca, protagonizados por Eduardo Noriega (Abre los Ojos y Tesis) y Dafne Fernández (Un paso adelante) y a Antonio y Ana, interpretados por Ernesto Alterio (Las viudas de los jueves y El método) y Juana Acosta (Vientos de la Habana), quienes son también pareja en la vida real. Entre sarcásticas charlas, todos esperan ansiosos la llegada de Pepe (Pepón Nieto, Mi gran noche) que presentará a su nueva pareja.

Dada la ocasión especial y que todos se jactan de no tener nada que ocultar, Blanca propone un juego para pasar una noche distinta: Dejar los teléfonos celulares en la mesa y que el primer mensajito que llegue sea leído en público. Esto traerá serios problemas entre las parejas y los amigos, ya que comenzarán a “sacarse los trapitos al sol”.

El guion original de Filippo Bologna, Paolo Costella, Paola Mammini, Rolando Ravello y Paolo Genovese, quien también dirige el filme italiano, se destaca por  aggiornarse a los tiempos del mundo actual sumergidos en la nueva tecnología que ha provocado un cambio en la comunicación interpersonal a través del smartphone y redes sociales, y plantea algunas preguntas a reflexionar: ¿Los teléfonos celulares y la nueva tecnología nos expone a situaciones que no queremos compartir? ¿se ha perdido la intimidad? ¿está toda nuestra vida en un smartphone? ¿cuál es el límite entre lo privado y lo público?

La película cuenta con excelentes actuaciones. Como es típico del cine de Alex de la Iglesia, este film tragicómico que bordea al género fantástico transita por momentos románticos, de incertidumbre, misterio, de pura ternura y de muchísima risa.