Partidos, voces del exilio

Crítica de Catalina Dlugi - El portal de Catalina

Con el subtítulo “voces del exilio”, la directora Silvia Florio aborda los testimonios de los que tuvieron que emigrar, fundamentalmente instalados en Madrid. Algunos tuvieron que huir con lo puesto, perseguidos por una militancia o por sus ideas condenadas en los años de plomo. Cada uno, de manera tan sincera como conmovedora cuenta porque se quedaron, si intentaron volver y luego regresaron, y también están los hijos, los que se criaron sin familia, con mucho silencio por años de parte de sus padres. Cada destino es singular, interesante y enternecedor. Pero además en ese libro que escribió Andres Habegger y la directora se instala la poesía, un poema que recita Hector Alterio en su último espectáculo, que se llama “Qué lástima” y pertenece a León Felipe. Esa inspiración de otro desarraigo que define este, con la fuerza intacta del dolor.