Ouija

Crítica de Hugo Zapata - Cines Argentinos

La famosa tabla de la Ouija no tiene suerte en el cine.
En el 2007 ya se había hecho una película malísima con un tema similar y esta nueva producción no ofrece una situación distinta.
El film fue producido por la compañía de Michael Bay, Platinum Dunes, y está basado en el juego de mesa de Hasbro, que incursionó en el cine de terror con este proyecto.
Ouija podría resultar una buena propuesta para chicos de 11 años que recién empiezan a ver este tipo de historias en la pantalla grande.
El resto de los espectadores encontrará una película horrenda y mediocre que en 89 minutos reúne todos los clichés posibles relacionados con historias de fantasmistas resentidos.
Cualquiera que se te venga a la mente lo encontrás en una escena de Ouija.
El chirrido de puertas, personas que son arrastradas por el piso por un ente maligno y efectos de sonidos trillados son algunos de los elementos que utiliza para "asustar" al público, Stiles White, un especialista en efectos especiales que debutó como director con este trabajo.
Algo irritante de esta película es que no presenta ningún elemento original que permita otorgarle cierta identidad propia a la historia.
El trabajo de White es mediocre y se limita a brindar un refrito burdo de otros filmes malos que se estrenaron en los últimos años.
Cabe destacar que este corte que llega a los cines es una versión mejorada de la película original que era peor. Cuando los ejecutivos del estudio Universal vieron el trabajo terminado del director White le ordenaron a los productores que modificaran el guión y filmaran la mitad de la historia otra vez porque era un desastre.
No sirvió demasiado.
Ouija es lenta, aburrida, y no ofrece ningún momento de terror decente. Un bodrio completamente olvidable por el que no vale la pena pagar una entrada al cine.
Esperemos que los estrenos de este género mejoren con el transcurso del año.