Omar

Crítica de Lilian Lapelle - Cine & Medios

Desarmados por dentro

Omar (Adam Bakri) es un joven Palestino que vive cerca del muro que divide a los territorios ocupados, siempre vigilado por soldados israelíes. Omar esta acostumbrado a trepar y cruzar el muro para ver a sus amigos de toda la vida Amjad (Samer Bisharat) y Tarek (Eyad Hourani), y para secretamente visitar a la hermana de Tarek, Nadia (Leem Lubany), de quien está enamorado.
Cansados del clima opresivo en el que viven, y de las humillaciones que reciben por parte de los soldados israelíes, los tres amigos planean un pequeño atentado, por el que luego Omar es detenido. Las torturas no son lo único que recibe en la cárcel, a Omar le proponen trabajar para el enemigo, ser un agente, un espía, y lo amenazan con matar a su familia si no lo hace. Aún sin aceptar, Omar se ve envuelto en una trampa que lo desarma a él y a su entorno, la confianza y el cariño entre los amigos desaparece y le da lugar a las sospechas, al odio; Omar se convierte en un sospechoso entre los suyos.
La historia explora tanto la situación política del lugar, como la situación personal de Omar, quien vive traiciones y rechazos, tanto de sus enemigos como de sus amigos.
Simple, directa, intmista, es esta película que muestra desde lo cotidiano una pequeña historia que es el espejo de todo lo que sucede en esa pequeña franja de tierra en la que el odio vive desde hace tantos años. Tiene excelentes actuaciones, simples, naturales, que reflejan el miedo, la paranoia y la incertidumbre en la que viven los personajes.
Es una gran historia, que muestra desde un lado muy interesante lo que sucede en esa complicada zona del mundo, donde las balas no son las únicas que lastiman y matan.