Nuestras mujeres

Crítica de Rocío Belén Rivera - Fancinema

DE MUJERES, AMISTAD Y SECRETOS

Nuestras mujeres, película realizada en 2015 y estrenada este año en la Argentina, se presenta como una comedia más de las tantas producidas desde el viejo continente. No por ello, no resulta efectiva y atractiva para pasar un grato momento.

El film narra la historia de tres viejos amigos, que deciden pasar una noche de juegos, ocasión que les permite salirse de la rutina en la que se encuentran inmersos gracias a sus trabajos, sus ocupaciones y… sus mujeres. El tópico sentimental de los conflictos amorosos será el eje central desde donde se construirá la trama, la intriga y efecto de comicidad de la cinta. Al mismo tiempo, esta temática permite repensar los diferentes estereotipos de pareja que circulan en el inconsciente colectivo de una comunidad: el matrimonio tradicional (y aburrido), la pareja que nunca se casa sin hijos, y aquellos “maduritos” que se casan con alguien joven en pos de impresionar a sus pares.

La película se desarrolla casi en su totalidad en la casa de uno de los tres amigos, Max, donde se rescata una hermosa puesta en escena de un departamento en el centro de París (por la ventana y muy de cerca se ve la torre Eiffel) y en la que se focalizan las paredes llenas de discos de vinilo que posee dicho personaje. Esto no sólo se podría encuadrar dentro del estilo vintage dominante en este último tiempo, sino que también resulta un elemento fundamental para construir la caracterización de los personajes y a su vez, una forma de comunicación y de manifestación de la interioridad de los personajes. Los únicos momentos que no trascurren dentro del departamento, son aquellos donde se representan las diferentes posibilidades que los personajes barajan, ya que la acción principal de la película es reconstruir un supuesto asesinato. Estos cortes en la linealidad de la acción principal de los personajes permiten reconstruir el estatuto de personaje de uno de los amigos, Simón, quien en la mayor parte del film se encuentra inconsciente y por lo tanto su caracterización nos llega a través de los otros dos personajes.

Se destaca la actuación de Daniel Auteuil, reconocido actor del cine comercial francés contemporáneo. En esta oportunidad explota la verbalización rápida, la exacerbación de los estados anímicos, pasando de la calma a la desesperación casi instantáneamente (se recomienda enfáticamente la película El placard, donde Daniel Auteuil y Gérard Depardieu realizan una exquisita comedia donde se problematiza la cuestión de géneros y lo laboral).

Entretenida comedia, sencilla, disfrutable para pasar un buen momento y sobretodo en este fin de semana extra large.