¡Nop!

Crítica de Gastón Dufour - Cinergia

Un examen de cómo el espectáculo da forma a nuestra cultura

El director Jordan Peele regresa con ¡Nop! para salvar al cine, si es que acaso el cine necesita ser salvado de algo, y nos trae tres géneros perfectamente vinculados en una película con 135 minutos que no pesan para nada. El nuevo trabajo del director neoyorquino tiene la cercanía de una película que no se sabe hacia dónde puede disparar. Esto es lo primero a afirmar a la hora de empezar esta opinión en forma de reseña.

Haciendo un poco de historia, Peele rompió bastante los esquemas con ¡Huye! (2017), y si bien algunas malas lenguas dicen que toma prestados múltiples elementos de otros films, la verdad es que representa una muy buena construcción general de la sorpresa a través de un guion bastante redondo y que, obvio, funciona.

Luego de la fallida, según mi humilde opinión, Nosotros, el director vuelve con todo en excelente forma, tomando tres géneros narrativos y desarmándolos a gusto, en un ejercicio maravilloso de cine. En ¡Nop! el manejo del ritmo de acción, la construcción del miedo y su incidencia en las secuencias que movilizan al mismo tiempo a los personajes como al espectador, son perfectamente deliciosas. Herramienta de funcionamiento la de la estructuración del tiempo de un relato que, contrariamente a lo que se cree en raptos de snobismo bastante comunes, no es mala palabra.

La muestra de coincidencia entre western-terror-ciencia ficción logra el efecto deseado, y toma en cada punto y en cada circunstancia durante la duración del film la parte que le toca, cubriendo el avance de lo que se narra. Extraterrestres, un peligro que en un inicio no es posible registrar a simple vista, la vida en medio de un paraje solitario y difícil, y el enfrentamiento a la amenaza (acaso esta última la definición por defecto del western) son las puntas que ¡Nop! toma y reparte a modo de cartas de un mazo mágico.

El elenco es fantástico por donde se mire: Daniel Kaluuya, Keke Palmer, Brandon Perea, Steven Yeun y Terry Notary, entre otros, hacen su parte para generar el relato que con justeza recomiendo ver tan pronto les sea posible.