Neruda

Crítica de Alejandro Lingenti - La Nación

El poeta en su laberinto

Ovacionado en el Festival de Cannes, este sexto largometraje del chileno Pablo Larraín (Tony Manero, No, El club) despertó en su país una polémica inútil acerca de la "veracidad" de la historia que cuenta alrededor de Pablo Neruda, poeta ganador del Nobel en 1971 y figura del Partido Comunista chileno. Es justamente su vertiente política la que privilegia Larraín, centrando el relato en la persecución que sufrió a fines de la década del 40, cuando era senador y el país era gobernado por Gabriel González Videla, impulsor de la "ley maldita", destinada a proscribir al PC del país trasandino por pedido de los Estados Unidos. Pero lo hace construyendo un film más conceptual que narrativo, sin ninguna aspiración documental evidente, que utiliza con inteligencia y precisión los recursos clásicos del cine negro e incluso algunos del melodrama. El hilo conductor del notable guión de Guillermo Calderón, reconocido dramaturgo chileno que vive en Nueva York, es la voz en off del prefecto Oscar Peluchonneau (García Bernal), un torturado personaje que vive literalmente a expensas de Neruda, exclusiva presa de su cacería, un intelectual megalómano, seductor y libertino que claramente no responde al canon mitológico. Con humor e irreverencia, Larraín dibuja su propio Neruda en esta película provocadora y barroca que rinde homenaje al personaje protagónico confiando más en el aliento poético de una ficción atrapante que en el rigor histórico que le vienen reclamando los partidarios del biopic reverencial.