Mujeres de la mina

Crítica de Alejandro Lingenti - La Nación

Tan cerca y tan lejos

Gracias a un viaje llevado a cabo para acompañar la asunción de Evo Morales a la presidencia de Bolivia en 2006, Loreley Unamuno, una de las directoras de este documental, conoció a Francisca Gonzales Santos, trabajadora en las minas del Cerro Rico de Potosí, cuya riqueza explotó sin culpa el colonialismo europeo.Ese primer contacto disparó la idea de esta película lúcida y austera que cuenta su sacrificada historia de vida y las de otras dos mujeres de la zona igual de tesoneras y politizadas, además de notablemente precisas en sus crudos testimonios. También aparece el valioso aporte del escritor uruguayo Eduardo Galeano, un conocedor del lugar, fallecido el año pasado. El film llega a su estreno en Buenos Aires con el aval de un envidiable recorrido por festivales de todo el mundo. No está tan lejos de nosotros, pero parece otro mundo. Y vale la pena asomarse.