Misión Imposible 5: Nación Secreta

Crítica de Daniel Lighterman - Visión del cine

Vuelve Tom Cruise como Ethan Hunt en Misión Imposible: Nación Secreta quinta parte de la saga.
Llega a los cines de la Argentina la quinta entrega de la saga cinematográfica de Misión Imposible con Tom Cruise nuevamente como protagonista y un enfrentamiento antagónico que promete atrapar al espectador más desconfiado.

En esta entrega, Ethan Hunt se enfrenta con “El sindicato” una asociación que busca a través de la provocación del caos y los asesinatos, derrocar a los sistemas de poder del mundo. Al mismo tiempo que esto ocurre, su jefe William Brandt (interpretado por el monofacético Jeremy Renner) debe enfrentarse a la némesis que la agencia FMI tiene en USA: La CIA, al mando de Alan Hunley (a cargo del genial Alec Baldwin).

Esta vez, el film llega dirigido por Christopher McQuarrie, más conocido por su carrera de escritor que por su escasa producción como director, pero que ha logrado con su película anterior (Jack Reacher, 2012) hacerse de un buen nombre en el círculo de las películas de acción.

Y es justamente la acción lo que va a poner a esta Misión Imposible en el centro de las miradas. Escenas en aviones, autos, motos, agua, calle transitada, locación desierta, día, noche… cualquier variante que el espectador necesite, el director proveerá.

Con un timing perfecto en el montaje, las escenas de acción de Mision Imposible ponen a prueba el temple del espectador más centrado, poniéndolo al filo de la butaca, lo cual hace muy bueno que la trama siga generando puntos de giro constantemente, dejando siempre lugar para un poco más de emoción.

Sin pedirle al film un gran despliegue a nivel guion, esta nueva entrega de la saga está plagada de acción, las más de dos horas del film se pasan volando y de esa manera el director se asegura que haya Misión Imposible para un buen rato.