Mientras duermes

Crítica de Luis María Fittipaldi - RosarioCine

El Silencio de los Porteros

Porteros de edificios, los hay de todo tipo, los piolas y los jodidos.En mi caso es un tipo que se da maña con todo, atento y servidor pero su debilidad es que no se pierde una.
Terrible chusma, que en la balanza digamos equipara.
La nueva peli de Jaume Balagueró (co-director de las "REC") trae la historia de César, portero de un edificio que si bien es atento durante las noches hace de las suyas, es decir espía, se entromete, y participa de un juego de perversidad con una inquilina.El tema es que ella no se entera de nada, y verán porque.
El personaje -a cargo del estupendo actor Luis Tosar, inolvidable en filmes como "Los lunes al sol" y "Celda 211"- posee toda su carga psicológica que parece escapada de un filme de Almodóvar o de Buñuel.
Un empleado de este tipo -además de ganar bonísimos sueldos- conoce a fondo a todos los inquilinos de un inmueble, sus movimientos, hábitos. Desde su posición resulta fácil controlar sus idas y venidas, estudiarlos, descubrir sus puntos débiles, sus secretos. Esto es analizado sin psicopatearse, pero nos da temor en ficción de cine tanto como en la realidad.
César vive asfixiado por su propia existencia, una perturbadora soledad que lo muestra tan retorcido como vacío, parece solo conectarse con su madre que agoniza en un hospital y que se convierte en un único oido disponible, y por vivir para observar y acosar anónimamente a Clara (Marta Etura).
Buen ejemplo de thriller con momentos atendibles de gran suspenso, muy bien actuado, y sobre todo para no dejar de saber que el portero siempre nos está observando.