Mientras duermes

Crítica de Juan Carlos Fontana - La Prensa

Un portero bastante temible

Dirigida con precisos matices de suspenso por Jaume Balagueró, la película consigue ciertos climas claustrofóbicos que le sientan bien al relato, a la vez que tiene algunos buenos diálogos y una excelente actuación de Luis Tosar, como el temible César.

El catalán Jaume Balagueró del que se vieron sus exitosas "Rec" y Rec 2" logra un filme por momentos escalofriante, teñido de una grata influencia buñuelesca que le sienta muy bien a la historia escrita por el italiano Alberto Marini.

"Mientras duermes" tiene por protagonista a un personaje no demasiado empleado en el cine de terror: el de un portero.

Luis Tosar es César, el portero de un edificio de amplios departamentos en Barcelona. Hombre amable, siempre dispuesto a ayudar a los dueños e inquilinos, tiene un costado tan oscuro, como los planes que pone en ejecución para matar, o aterrorizar a los que viven en la casa que cuida.

LOS DEBILES

César se ensaña con algunos de los más débiles del lugar: una joven que vive sola y se acaba de mudar, una mujer mayor y la señora de la limpieza y su pequeño hijo.

Desde un mar de cucarachas que invaden un departamento, hasta observar lo que hace un muchacho y una chica cuando están solos, todo lo observa César con una cara de "yo no fui". Sin embargo detrás de su mirada acecha una especie de monstruo capaz de algunas de las ideas más horrendas que pueda imaginar un ser humano.

Dirigida con precisos matices de suspenso por Jaume Balagueró, la película consigue ciertos climas claustrofóbicos que le sientan bien al relato, a la vez que tiene algunos buenos diálogos y una excelente actuación de Luis Tosar, como el temible César.