Mi mejor amigo

Crítica de Rodolfo Bella - La Capital

La amistad en medio de la desolación

“Mi mejor amigo” es un relato sobre una amistad puesta a prueba. Los protagonistas son dos niños preadolescentes que conviven junto a otros cientos en un internado de Turquía. Aislado en medio de las montañas, el lugar es dirigido por un equipo docente cuya regla principal es el rigor y la disciplina.

En ese contexto y con una tormenta de nieve y temperaturas bajo cero, dos chicos pelean durante su ducha semanal y como resultado de eso ambos son obligados a terminar de bañarse con agua fría. Al otro día, el más pequeño, comienza a debilitarse gradualmente hasta terminar inconsciente sobre la camilla de una enfermería sin calefacción.

En medio de esa desolación real y emocional, su mejor amigo comienza a movilizarse para que alguien le preste atención. Pero la nieve arrecia, los coches no están equipados con los neumáticos que deberían y la señal del teléfono celular es deficiente.

Según declaró el director, parte de la inspiración para este film le llegó de su experiencia en un internado y aseguró que uno de los sentimientos que lo marcaron fue el miedo y la sensación de control permanente. El cineasta logra transmitir esa sensación desde el principio al fin, tanto como el autoritarismo de casi todos los docentes y del director.