Mentes poderosas

Crítica de Catalina Dlugi - El portal de Catalina

La ciencia ficción, las distopías donde los adolescentes y niños son los protagonistas y víctimas son seguidas con interés. Pensemos en el éxito de “Strangers Things” o las sagas con tantos seguidores como “Los juegos del hambre” o “Maze Runners”. Aquí es seguro que también nace una saga. Un tiempo en que la mayoría de los niños de EEUU muere al llegar a los 10 años y los pocos que sobreviven adquieren o rebelan poderes especiales. Chicos que son llevados a supuestos lugares de cura, donde según sus dotes los califican con colores y donde les espera un destino del que mejor es huir. Como lo hace la protagonista que se une a un grupo de chicos fugitivos que persiguen un paraíso, una verdadera utopía. La película dirigida por Jennifer Yuh Nelson (que viene de los éxitos en animación como Kung Fu Panda), con guión de Chad Hodge, basada en las novelas de Alexandra Bracken (un best seller, claro) es muy efectiva en las escenas de acción y en la demostración de los superpoderes pero cuando llegan los momentos románticos se ven forzados, obvios y alargados sin razón aparente. Insertados por mandato comercial. Una mezcla que resiente algunas buenas ideas pero que seguramente están destinadas a un público preadolescente. Lo demás tiene tensión, elenco, buenos efectos y aunque se adivinen conclusiones, resulta entretenida. Siempre el mundo adulto aparece como el enemigo que sacrifica y utiliza a la generación de los jóvenes. Una constante histórica.