Matar al dragón

Crítica de Delfina Quiquisola - Metafilmika

Del otro lado del bosque
Relatos oscuros fantásticos y leyendas clásicas invaden la historia del nuevo film de Jimena Monteoliva.
Escrita por Diego Fleischer y dirigida por Jimena Monteoliva, Matar al dragón (2020) nos adentra en la historia de Elena (Justina Bustos), una joven que despierta en un hospital y al borde de la inconsciencia, reconoce a su hermano Facundo (Guillermo Pfening)junto a ella. Cuando era tan solo una niña, la protagonista había sido secuestrada y arrastrada hacia un infierno, en el que una raptora la mantuvo alejada de su mundo, y cercana al horror profundo por la mayor parte de su vida. Pero la vuelta a su hogar, junto con su hermano y su familia, no será nada fácil y haber escapado de aquél lugar recóndito, la perseguirá e invadirá su intento de reestablecer su vida.
La fotografía de la película se presenta en un contraste evidente entre aquel infierno y el paraíso, dónde el oscuro lugar infernal que la mantuvo presa a la protagonista, se enfrenta abruptamente con la luz que la recibe al otro lado, en su hogar.
A lo largo de la película, pueden percibirse algunos guiños directos hacia cuentos con personajes clásicos; y otras referencias o elementos presentes en muchas historias de ciencia ficción y terror, como lo es, por ejemplo, la infancia en su enfrentamiento con criaturas oscuras en tantas obras de Stephen King.
"Si bien a algunos personajes y elementos del guión les faltó su detalle de desarrollo, Matar al dragón (2020) cumple su rol como relato fantástico, un género no tan visto en los últimos años en el cine nacional."