Maradona - Médico de la selva

Crítica de Daniel Garabal - Clave Noticias

Imperdible film de un hombre ejemplar

Cuando uno dice el nombre de Maradona obviamente la mayoría lo asocia automáticamente con el futbol. Sin embargo hubo otro Maradona, el Dr. Esteban Laureano Maradona. Este prohombre que nació en 1895 y nos dejó en 1995 fue un verdadero ejemplo para la sociedad.

Un médico que habiendo podido ejercer su profesión en Buenos Aires, inclusive el Dr. Pedro de Elizalde lo quería para que trabajara con él, decidió dejar su vida y conocimientos en Estanislao del campo, un remoto paraje de Formosa. Ahí con casi ningún recurso más que su sabiduría y su genio se las arreglaba para cuidar la salud de los formoseños del lugar y también de los pilagá que habitan la zona a quienes les fundo una colonia para que pudieran vivir y estudiar en su idioma y en su lugar de origen. El Dr. Maradona no solo fue un médico rural, fue un férreo defensor de los pueblos originarios. También utilizaba sus conocimientos de las plantas y las hierbas para fabricar sus propios medicamentos.

Todo lo que veía, todo lo que descubría lo iba escribiendo y dibujando (con dibujos realmente fantásticos) en sus libros, libros que fueron, en algunos casos, puntapié para ediciones de los EE.UU., quienes s e o quisieron llevar para allá. El prefirió quedarse y vivir en su pueblo, con una austeridad que realimente es fue un ejemplo. Un hombre que al fin tiene un documental que lo muestra tal cual era. Con sus maravillosas virtudes, y también con sus cosas, como humanizándolo. Martin Serra logra un documental donde lo muestra como un hombre que fue creador de su propio destino, más allá de que algunas veces, causas fortuitas (como la que ocasiono su residencia den Estanislao del Campo), le hicieran de puntapié para su recorrer su camino.

“Maradona, Medico de la Selva” es uno de esos documentales que tendrían que pasarse en los colegios y en todos los lugares posibles. Todos los argentinos tendríamos que ver este documental para conocer a un hombre que hizo de su vocación, de su austeridad, de su honestidad y, porque no, de sus misterios, una bandera ejemplo para todos los hombres de buena voluntad. “Maradona, Medico de la selva” : Imperdible.