Mad Max: Furia en el camino

Crítica de Franco Quiroga - El Lado G

“Max, Max estás hecho una pena”, así como reza esa canción de la banda española Siniestro Total que homenajea a nuestro anti héroe es la forma más correcta de describir el presente de Max Rockatansky (Tom Hardy) al comienzo de esta cuarta entrega de la franquicia creada por George Miller.

Mad-Max-Fury-Road-11

El estado deplorable de su chaqueta de cuero y su Pursuit Special reflejan y marcan un paralelismo con su estado mental. Max esta atormentado, Max no pudo salvar a aquellos a los que había jurado proteger y deambula sin destino cierto por las ahora áridas tierras que rodean nuestro planeta desbastado por la guerra del petróleo. En su causa perdida ve un halo de luz en la búsqueda de un lugar mejor por parte de Furiosa (Charlize Theron), así como también un camino hacía la redención y la esperanza que ya habían sido olvidadas.

FURY ROAD

En este mundo distópico en el que se centra el film las relaciones mercantiles se han retrotraído a un estado feudal. Los elementos más necesarios han sido acaparados por tres grandes “Señores Feudales”, por llamarlos de alguna forma, con sus respectivos reinos: La Ciudad del Combustible, La Granja de las Balas y, donde comienza la travesía de esta road movie, “La Ciudadela”. La última de estas está gobernada por Immortan Joe (Hugh Keays-Byrne, el cual ya había tenido un papel preponderante en la Mad Max de 1979), quien controla uno de los más valiosos recursos: el agua.

9-Mad-Max-AP

Un apartado especial merecen la dirección de arte, vestuario y producción, desde los maquillajes de todos los personajes que juegan con lo grotesco –mención especial para los detalles que tienen los tres capos de las ciudades- hasta lo que lograron con los vehículos que es simplemente increíble. Por otro lado la paleta de colores elegidas, que se modifican a medida que avanza la trama, desde ocres brillantes cuando la persecución esta en su máximo esplendor hasta los pálidos en situaciones que rozan la muerte.

Más allá de los efectos especiales, la física y mecánica con que están modificados los automóviles funciona de manera realista y armoniza con todo lo que está pasando en pantalla: tanto así que podemos ver un acoplado con parlantes gigantes, tambores y un fucking loco con una guitarra doble escupe fuego que van musicalizando la persecución, como otros autos con una especie de péndulos humanos que lanzan picas explosivas. La sinfónica de la destrucción.

mad-max-fury-road-book-cover-art

Who killed the world?

Immortan Joe, aquel que ha tocado el Sol y ha vuelvo para guiar a sus guerreros y a su pueblo, es la representación personificada del salvajismo capitalista moderno, un ser grotesco que mantiene a su población con migajas de la producción. En las alturas de su Ciudadela reserva para él los últimos vestigios de sabiduría y belleza que han quedado en este mundo, aquello que Furiosa pretende liberar y que son el leitmotiv de este film. Sus War Boys se lanzan a la batalla con una ideología totalmente nórdica, no les importa morir. Es más, con ella empezarán su segunda vida en el Valhalla. Toda esta doctrina es la que está enmascarada detrás de una película que no necesita contarte esto, está ahí. Implícito. Detrás de una vorágine de acción y destrucción.

DSC_3888.JPG

El lenguaje audiovisual de la acción es captada tanto desde planos panorámicos como así también con un buen uso, sin abusar, de la cámara acelerada y primerísimos planos que hacen añorar aquellas películas de los 80`. Aunque todo pase rápido y sin respiro para el espectador, este no se pierde de nada.

Sin duda una de las decisiones más arriesgas y acertadas de Miller fue llevar a Max al papel de protagonista secundario. Él no es el engranaje superior que mueve este film, sino que se encuentra preso de las circunstancias, aunque sin perjuicio de ello es una parte necesaria para llevar adelante la historia. Quien toma la posta e impulsa la trama hasta el vértice donde esta regresa es Furiosa.

mad-max-fury-road

Detrás de cada escena visceral e inescrupulosa de Mad Max: Fury Road está la visión de un director cinematográfico que supo cómo darle un renacer esplendido a una saga que llevaba treinta años encajonada. Así, alejado de los tiempos hollywoodenses de producción y filmación, con un desarrollo de la trama que sólo se basó en su storyboard, Miller creó lo que para mí ya es un clásico de culto moderno y que estará en mí corazón de ahora en más. Sean testigos de la mejor película de su genero en mucho tiempo.