Mad Max: Furia en el camino

Crítica de A. Degrossi - Cine & Medios

Brutal y furiosa

En un futuro donde el mundo que conocemos ha sido destruido y solo queda polvo y metal, una mujer está a punto de hacer la diferencia. Mientras Immortan Joe se impone como líder de una ciudadela poblada por seres deformes, Furiosa (Charlize Theron) se prepara para comandar una travesía que tendrá un destino sin marcha atrás posible.
Las acciones llevarán a un hombre sometido a ser la "bolsa de sangre" de uno de los guerreros de Joe, a tener la posibilidad de liberarse de una muerte segura. El sujeto sin nombre (Tom Hardy), abrumado por un pasado trágico que detona una y otra vez en su mente, cruza su destino con el de Furiosa, y juntos emprenden la más brutal de las aventuras.
Esta no es una remake del filme protagonizado por Mel Gibson, es otra aventura, otra historia, con un mismo contexto y estilo, mejorado, superior por donde se lo mire. George Miller nos ofrece un festival de acción y violencia como hacía tiempo no se veía en pantalla. La acción es trepidante, no da respiro, hasta podríamos decir que hacia el final es agotador. El ruido de los motores de los vehículos modificados que se lucen durante todo el metraje se funden con la guitarra distorsionada y los tambores que marcan el pulso del relato, dando forma así a una banda de sonido atronadora.
Charlize Theron es la auténtica protagonista del filme, se luce como mujer de acción; en tanto Tom Hardy saca provecho de un personaje que tiene poco para decir pero mucho para mostrar. Su Max apenas se ha presentado, pero seguramente en próximas entregas desatará su locura. Y es de esperar que sea Miller quien nos la muestre.