Love punch

Crítica de Beatriz Molinari - La Voz del Interior

Humorada para mayores

Un pareja de exesposos estafados inicia una aventura disparatada en la riviera francesa para recuperar el dinero de la jubilación perdido.

A tono con el cine de entretenimiento que no invierte en ideas creíbles, Love punch (Un golpe brillante) recicla los materiales tantas veces vistos en películas protagonizadas por actores jóvenes. En este caso, Pierce Brosnan y Emma Thompson componen una pareja de exesposos, unidos por una circunstancia ajena a su voluntad.

Con el clima de desamparo que planteó hace tiempo Las locuras de Dick y Jane, la comedia tragicómica de Jim Carrey, Love punch comienza con la estafa de un empresario a los empleados que pierden todos sus ahorros y las posibilidades del fondo de retiro. Con la jubilación pisándole los talones, Richard se propone escarmentar al insensible dueño de la empresa que queda pulverizada. Para ello, convence a Kate y a una pareja amiga (Thimoty Spall y Celia Imrie) para emprender un viaje a Francia.

Las peripecias mantienen el ritmo de la película dirigida por Joel Hopkins, también director de la anterior película romántica de Thompson, Nunca es tarde para enamorarse.

Paisajes y música van armando los escenarios y los climas emotivos. Algunos momentos están editados como videoclips, con los clichés propios de la cámara que remoza un material conocido. El recurso sirve para la síntesis de acciones disparatadas.

Mientras tanto, el juego de seducción gira en torno al reencuentro de Richard y Kate, embarcados en una aventura dantesca, con referencias a James Bond, y el glamour de la riviera francesa donde se organiza una fiesta fastuosa.

El cuarteto de actores cumple con gracia los roles de los adultos enredados en un juego medio loco que animan a fuerza de indignación. La estafa después de una vida de trabajo es una catástrofe ante la cual no pueden permanecer impávidos."Seguimos adelante o estamos acabados", es la máxima que ponen en marcha para recuperar el dinero y la dignidad.

Con vueltas de tuerca que dejan bien parado al matrimonio aventurero, Love punch se toma la revancha frente a un tipo de cine que rinde culto a la juventud. Los diálogos, muy ágiles, los disfraces y simulaciones dan como resultado una película sencilla. Con muy buenos comediantes que suplen la buena química con oficio, y el tema del amor como un amuleto de la buena suerte, la historia tiene el encanto de la gente que parece común hasta que se inventa su propia hazaña.