Los tres chiflados

Crítica de Juan Carlos Fontana - La Prensa

Con tres eficaces comediantes

Los más chicos sin duda disfrutarán de estos nuevos "chiflados", que los harán divertir con su humor sencillo y acciones repetitivas.

La elección de los nuevos Curly (Will Sasso), Moe (Chris Diamantopoulos) y Larry (Sean Hayes), es sin duda uno de los más valorables aportes de esta nueva comedia de los "rebeldes" directores estadounidenses Peter y Bobby Farrelly.

De los Farrelly se vieron certeras comedias como "Pase libre" y "Tonto y retonto", dedicadas a una generación de veinteañeros para arriba, pero en este caso al elegir volver a llevar a la pantalla grande a los míticos "Tres chiflados", se preocuparon por contar una historia que hiciera reír a los más pequeños, con una fórmula bastante simple y efectiva.

El filme está contado mediante episodios, como muchos de los capítulos del trío, que se veían por la televisión en la década de 1950 hasta 1970, aunque los "chiflados" también fueron protagonistas de largometrajes, siendo el primero de los míticos años "20.

PARA ESTA EPOCA

La actual película, dedicada a las nuevas generaciones, comienza con el trío cuando aún eran bebés y son criados por un grupo de simpáticas monjas de un orfanato a las que les hacen la vida imposible con sus travesuras.

Pero la historia no se detiene en esa época, acompaña el crecimiento de Moe, Larry y Curly hasta que son adultos, intentan conquistar alguna chica, o se embarcan en arriesgadas misiones como la de ser contratados para matar a un hombre, que según les dicen, padece una enfermedad terminal.

El filme se apoya en un momento clave de la vida de los muchachos, cuando se enfrentan a la cruda realidad de que el orfanato en el que vivieron toda su vida, corre el riesgo de ser rematado, para pagar viejas deudas y Curly, Moe y Larry, salen a tratar de conseguir el dinero para que no les quiten ese hogar que en definitiva es su casa, puesto que los tres son huérfanos.

COMEDIA FISICA

"Los tres chiflados" de Peter y Bobby Farrelly, recrean con buenos recursos la acción de las comedias físicas, que se apoya en gestos algo violentos, "piquetes" de ojos, torniquetes en la nariz, golpes en la cabeza con un martillo (de goma aclaran los Farrelly en una escena al final del filme, para que los chicos no repiten esa acción en sus casas) y en certeras cachetadas.

Los más chicos sin duda disfrutarán de estos nuevos "chiflados", que los harán divertir con su humor sencillo y acciones repetitivas. Aunque el filme tiene una escena que pasa en una guardería que también hará reír a los mayores. Comedia de equívocos, la película muestra las magníficas recreaciones que del legendario trio, realizan notables comediantes, como Sean Hayes, Will Sasso y Chris Diamantopoulos, en los papeles de Larry, Curly y Moe. A su lado se desempeñan correctamente la simpática Kate Upton, como la hermana Bernice y Larry David, en el papel de la implacable Mary-Mengele.