Los inventados

Crítica de Juan Pablo Russo - EscribiendoCine

La trama sigue a Lucas (Juan Grandinetti), un joven que busca un taller de actuación y se ve seducido por una mujer que conoce mientras lee una cartelera informativa. En un impulso, se anota en un retiro donde la única consigna es fingir ser una persona diferente a la que uno es. Sin embargo, pronto descubre algo extraño cuando nota que alguien ha desaparecido sin que nadie registre su ausencia.

A partir de ahí, la película se convierte en un juego de verdadero/falso en el que todos parecen ser cómplices de un guion que se desarrolla en la vida real. Los personajes, al igual que el espectador, son manipulados por el dispositivo narrativo para dejarse llevar por el mecanismo propuesto y encuentren (o no) la verdad.

La película propone una ficción dentro de otra ficción para interpelar sobre lo real, lo tangente, lo visible y aquello que uno es. Los directores construyen una comedia laberíntica con toques fantásticos y una impronta borgeana que desafía los límites de la verdad a través de una ficción que se desprende de otra.

El elenco liderado por Grandinetti, Verónica Gerez, Iván Moschner, Rosina Fraschina, Sebastián Godoy y Gastón Dubini, está en sintonía con la propuesta y logra sumergir al espectador en una historia que lo lleva a cuestionar la misma realidad en la que se halla inmerso.

Los inventados (2021), que ha participado en casi una veintena de festivales, resulta una obra intrigante e innovadora en el cine argentino, que juega con los personajes y el espectador para desdibujar los límites entre lo real y lo ficticio e hibridizar los géneros narrativos.