Liga de la Justicia

Crítica de Fernando Casals - Revista Meta

¿Cuántos superhéroes se necesitan para salvar al universo? Al parecer, al universo cinematográfico de DC no lo salva ni la Liga de la Justicia, pese a la presencia escénica de Wonder Woman, el carisma de Aquaman y el intento -a veces fallido- de humor de Flash.

La Liga de la Justicia reúne dos íconos sobreactuados (Affleck y Canvill), un modelo feminista (Gal Gadot), un Thor acuático (Jason Momoa) y dos superhéroes que no podrían sostener sus propias películas (Miller y Fisher). Eso sí, DC supera a Marvel en algo, La liga de la Justicia tiene el peor villano que se haya visto en un film basado en cómics.

Otra vez, Zack Snyder nos abruma con una trama pobre y efectos CGI redundantes. Un poco de ligereza en el guión hace la experiencia más llevadera, pero no alcanza.

El guión de Chris Terrio y Joss Whedon (basado en una historia de Terrio y Snyder) muestra a los miembros de la Liga de la Justicia como un grupo de inadaptados sociales que necesitan aprender el valor del trabajo en equipo para salvar al mundo. Pero aunque la historia es un tributo a la fuerza de la colaboración, la película en sí es un ejemplo de como demasiadas visiones creativas pueden arrastran un proyecto en direcciones opuestas.

Ambos Snyder y Whedon han realizado buenas películas basadas en comics por separado; en conjunto, sus habilidades se anulan, la predilección de Whedon por el humor socava el tono grandilocuente de Snyder. Sus estilos simplemente no se cuadran. A medida que la Liga se une, la película se desmorona.

Gadot sigue siendo todo un modelo de virtud como la Mujer Maravilla, pero aquellos que apreciaron cómo en su película la directora Patty Jenkins se negó a tratarla como un objeto sexual, probablemente notarán que Snyder y Whedon caen en el cliché de tomarla desde ángulos de cámara semi voyeurísticos.

Affleck, por su parte, se ha relajado un poco desde Batman v Superman, pero su Bruce Wayne sigue luciendo obligado a regañadientes a salvar al mundo, tal vez sea un espejo de como se siente el actor de tener que interpretar al encapotado.

Liga de la Justicia es una actualización del universo DC que busca encauzarlo con toques de humor. Sin embargo, una película que pretende ser la culminación de un clásico de DC parece en cambio una preparación para otra secuela. El signo de los tiempos, un cine serializado incapaz de crear una historia autoconclusiva.