Lejos de ella

Crítica de Manuel Yáñez Murillo - Otros Cines

Go West

El estreno comercial en la Argentina de una película de un director del talento del chino Jia Zhang-ke es un verdadero acontecimiento cinéfilo. Si bien no se ubica como la mejor de la notable filmografía del creador de Naturaleza muerta, The World, Platform, Xiao Wu, Unknown Pleasures y The World, Lejos de ella tiene dos notables episodios (ambientados en 1999 y 2014) que justifican con creces su visión, pese a que el tercer y último segmento (que transcurre en la Australia de 2025) resulta demasiado caricaturesco.

Lejos de ella no es una película redonda. Puede que ni siquiera sea una de las mejores películas del gran cineasta chino Jia Zhang-ke. Y, pese a todo, el nuevo film del ganador del León de Oro de Venecia por Naturaleza muerta es para este crítico lo mejor que se ha visto en la Sección Oficial de Cannes 2015.

Una saga familiar en tres tiempos puntuada por el uso de tres anchos de imagen distintos, Lejos de ella nos lleva desde la China de 1999 hasta la Australia de 2025, dibujando una lúgubre crítica al proceso de deshumanización que sufren las sociedades capitalistas. Sin necesidad de parábolas, yendo directo al grano, pero utilizando también múltiples mecanismos de distanciamiento (a la Brecht), Jia Zhang-ke traza un relato de corte melodramático en el que los sueños de prosperidad de todo un pueblo se estampan contra la perversidad de un modelo socioeconómico.

Lejos de ella reúne elementos de varias películas de Jia Zhang-ke: el arco histórico de Platform, la dimensión global de The World y el pulso narrativo de A Touch of Sin. El director de Xiao Wu parece haber dejado atrás el proceder pausado y observacional de sus primeras películas, sustentado en amplios planos generales y prolongados travellings laterales.

Por el contrario, ahora el autor de Unknown Pleasures parece especialmente interesado en acercarse a sus afligidos personajes, “encerrándolos” en encuadres sin profundidad de campo que evocan una cierta claustrofobia existencial. Esta apuesta formalmente opresiva alcanza su punto álgido en el deslumbrante primer capítulo de Lejos de ella, filmado en 4:3 (formato casi cuadrado) y propulsado en su arranque por un uso festivo y fatalmente irónico del Go West de los Pet Shop Boys. La pletórica coreografía musical que abre la película captura a la perfección el tono de este colorista episodio, ambientado en 1999 y marcado por las ilusiones de una generación que cabalga a lomos del progreso económico y los anhelos de riqueza.