Latinoamérica, territorio en disputa

Crítica de Juan Pablo Russo - EscribiendoCine

Las venas abiertas

El avance de la derecha y las políticas neoliberales en la región son analizadas por ex presidentes y referentes de la política actual en Latinoamérica, territorio en disputa (2019), documental de corte periodístico (y abiertamente político) de Nicolás Trotta y Esteban Cuevas.

Nicolás Trotta emprende un viaje por Brasil, Bolivia, Uruguay, Paraguay, Chile y Bélgica para entrevistar a los ex presidentes Pepe Mujica, Rafael Correa, Fernando Lugo, Dilma Rousseff, Lula da Silva y al actual presidente boliviano Evo Morales, como así también a ex candidatos presidenciales, sociólogos y diferentes personalidades de la coyuntura política actual, quienes reflexionan sobre cuestiones vinculadas al fin de los gobiernos populistas y el avance de las ideas de centro derecha.

Cómo una especie de road movie Trotta recorre Latinoamerica (en persona y a través de un archivo audiovisual) para confrontar el presente y el pasado reciente, parándose en una clara posición ideológica, pero generando preguntas para que sea el propio espectador quien tenga que buscar las respuestas. Latinoamérica, territorio en disputa tiene la particularidad de ser como una ensalada que el comensal debe condimentar si no quiere que quede desabrida. Y esa interpelación buscada lo vuelve más atractivo en su forma.

Si bien es cierto que por momentos el documental se vuelve demasiado periodístico, de esos llamados de cabezas parlantes, lo interesante está en toda la data comprobable que ofrece, con números y estadísticas de cada país en donde de acuerdo a las diferentes políticas aplicadas estas favorecen al pueblo o a cierto sector privilegiado. Además, en modo de síntesis, se cuenta la historia reciente, sin omitir nada, ni incluso la situación de Venezuela, y sin que haya un exceso de información que maree al espectador. También hace hincapie en el rol de los medios de comunicación y como estos juegan en favor de sus propios intereses.

Latinoamérica podría resumirse como un western con dos bandos donde de acuerdo a las circunstancias ganan los "buenos" o los "malos", circunstancias claramente influenciadas por una serie de factores afines a ciertos intereses más cercanos a los económicos que a los humanos. Al menos esa es la primera reflexión que se desprende después de ver Latinoamérica, territorio en disputa.