La razón de estar contigo. Un nuevo viaje

Crítica de Hugo Zapata - Cines Argentinos

Dentro de los dramas de ficción con caninos, Hachiko (tanto la versión original de los ´80 como su remake hollwoodense del 2009) y La razón de estar contigo lideran sin discusión el podio de las películas lacrimógenas.
Por más que te hagas el cínico o desprecies su argumento eventualmente estos filmes te hacen llorar.
Salvo que no hayas tenido le experiencia de tener una mascota las historias mencionadas llegan al corazón porque traen al recuerdo los perros que te acompañaron en la vida.
Debo expresar que los productores que hicieron esta continuación lo lograron otra vez.
Resulta gracioso porque uno piensa que ya conoce la premisa entonces el efecto no será el mismo.
Olvidate.
La película manipula los sentimientos del público como los dioses y en algún momento del conflicto es inevitable que las lágrimas caigan otra vez.
La continuación, que por cierto es bastante digna, sigue la línea del film anterior por el modo en que está construido el melodrama y las interacciones de los perros con los personajes humanos.
El concepto es el mismo con la diferencia que la atención se concentra esta vez en la nieta del personaje que interpretó Dennis Quaid en la entrega previa.
El film presenta otro melodrama sobre temáticas deprimentes, como el alcoholismo, las enfermedades terminales y las relaciones abusivas.
En el medio de todo este lío están las diversas encarnaciones de Bailey que te compra nuevamente con la narración en off de Josh Gad.
En lo personal me quedo con la película original por el hecho que me gustó más la relación que se daba entre el personaje de Quaid y el canino, pero la segunda parte logra ser entretenida y seguramente será valorada por los amantes de los animales.