La poética de la fragilidad

Crítica de Rocío Belén Rivera - Fancinema

LA FRAGILIDAD DEL CUERPO Y LA SOCIEDAD

¿Qué es lo inherente al ser humano? Hay muchas respuestas para esa pregunta, quizá tantas como personas que se animen a responder dicho interrogante. La poética de la fragilidad responde que justamente esto es intrínseco a la existencia humana: lo frágil.

El film de Nicolás Grandi y Lata Mani, experimental desde lo visual y lo sonoro, muestra con puntillismo, fragmentación y delicadeza la fragilidad que existe en el hombre y en la naturaleza, dejando en evidencia que precisamente lo frágil es común a todas las formas de vida. Componiendo su relato desde una concepción visual artística, conjugada con relatos en primera persona de aquellos que sufren algún tipo de convalecencia por la fragilidad de sus cuerpos, la película construye un relato múltiple y colectivo, que se encuentra hilvanado por una voz en off que une y da coherencia a todos los relatos, y que le otorga al conjunto una atmosfera filosófica.

La mezcla de imágenes, relatos, sonidos, historias y países hacen que la película se enuncie desde lo estético como una mostración filosófica sobre la existencia, pero además como una declaración política, ya que la relación con la fragilidad social (intrínseca al régimen capitalista que nos subyuga a nivel mundial) también se encuentra explicitada en la película. Su ritmo es lento y calmado, lo que permite apreciar y sentir lo profundo de su mensaje, que va más allá de las imágenes que presenta.

La poética de la fragilidad es una interesante propuesta dentro de la producción documental Argentina, que escapa de las convenciones del género, para combinarlo con el potencial artístico-estético que el cine posee.