La película infinita

Crítica de María Fernanda Mugica - La Nación

¿Qué pasa con el material filmado cuando una película argentina queda inconclusa? Lo más probable es que quede olvidado, guardado para no ser visto nunca más. Gracias a una idea muy original de Leandro Listorti, algunos de esos planos y escenas que quedaron perdidas ahora son parte de un nuevo film, La película infinita.

Listorti es especialista en archivo y trabaja en el Museo del Cine. Fue encontrando fragmentos de películas que no habían podido terminarse por distintos motivos y decidió juntarlos en un film que le da valor a la recuperación de estos materiales destinados al olvido. Los fragmentos pertenecen a películas de Mariano Llinás, Martín Rejtman, Mariano Pensotti y Nicolás Sarquis; algunas de las imágenes recuperadas están en color y otras en blanco y negro; son más cercanas o más lejanas en el tiempo; aparecen actores reconocidos de distintas generaciones como Pepe Soriano, Héctor Alterio y Ana Katz. El director encontró la forma de combinar todo en un solo film que genera curiosidad y fascinación.

Si cada parte muestra algo concreto que se rodó y permite imaginar cómo hubiese sido la película para la que fue filmada, el montaje elegido le da un nuevo sentido en relación con las otras partes, dejando latente la posibilidad de otras combinaciones. La película es infinita porque encierra a otras que existen como una potencialidad.