La maestra

Crítica de Alejandro Lingenti - La Nación

Un eficaz cuento moral

La llegada de una nueva maestra a una escuela de Bratislava en 1983 -pleno auge del comunismo en Europa- altera primero la vida de un grupo de alumnos y luego, la de sus padres. Maria Drazdechova, la antipática protagonista de la historia, aprovecha sus conexiones con la cúpula del PC checoslovaco para extorsionar a todo aquel que se cruce con ella.

Petr Jarchovsky, el guionista de este film de importante recorrido en festivales y muy celebrado por la crítica internacional, partió de sus recuerdos personales para elaborar un cuento moral que detalla con eficacia los sofisticados mecanismos de acoso de un personaje siniestro que funciona como síntesis individual de las miserias de todo un sistema.

El humor negro y corrosivo que sobrevuela la película morigera un poco su aliento moralizante, quizá su principal defecto. Cineasta desconocido en nuestro país, Jan Hrebejk ya dirigió una decena de largometrajes y parece moverse más cómodo en el terreno de la farsa que en el de la gravedad. Su cuidado trabajo de puesta en escena y su capacidad para alinear a un elenco numeroso en un mismo registro son evidentes fortalezas.

La idea de volver sobre las mezquindades y los abusos del régimen -en este caso en la época en la que tímidamente empezaba a fermentar la famosa Revolución del Terciopelo-, en cambio, recicla una vez más y sin demasiados matices novedosos una crítica ya suficientemente difundida.