La leyenda de Tarzán

Crítica de Tadeo - Loco x el Cine

Tarzán vuelve al cine, esta vez con una película Live Action.

Hay personajes que son emblemáticos mas allá del formato en el que pueden llegar a ser presentados. A veces, estos personajes, trascienden descomunalmente los distintos tipos de medios en los que se los puede presentar. Libros, comics, series, películas. Tarzán es uno de esas leyendas de antaño que ha acompañado a varias generaciones y se ha adaptado a diversas formas de entretenimiento. El concepto es simple: un hombre que vive en la jungla africana y es una leyenda viviente del corazón selvático donde habita; aquel que vive entre animales y puede comunicarse con ellos, viviendo en armonía y siendo aceptado mas allá de ser un humano.

Es imposible hablar de Tarzán para ciertas generaciones sin recordar la famosa adaptación de Disney, si bien otras adaptaciones se han dado a lo largo de los años, la ultima marca importante sobre el personaje fue esa entrañable película de dibujos animados musicalizada por Phil Collins. Incluso para muchos el concepto de Tarzán surge de esa misma película y se olvida sus orígenes en el formato de libros y novelas cortas donde el personaje dio sus primeros pasos para convertirse en leyenda. Algunos años después su presencia nuevamente aparece en la pantalla grande, esta vez de la mano de actores de carne y hueso.

La Leyenda de Tarzán toma muchos de los conceptos que ya conocemos y trata de dar una visión fresca al ya conocido personaje. La película no se detiene a querer agarrar simplemente las ideas generales que la gente tiene sobre el personaje e indaga mas en algunos aspectos que solo los lectores de las novelas escritas por Edgard Rice Burroughs (creador de Tarzán, el cual escribió mas de 25 novelas del personaje) podrán tener conocimiento previo. Si bien esta nueva adaptación cuenta con algunos conceptos frescos, realmente estas variantes no ayudan mucho a mejorar la calidad final del filme.

Esta entrega del mítico personaje cuenta con algunos conceptos muy interesantes, lo cual hace que su fracaso en muchos aspectos sea mas decepcionante con estas expectativas que sin ellas. Vez tras vez a lo largo de sus aproximados 110 minutos el espectador se aferra a la idea de que en cualquier momento las apuestas subirán y el resultado será satisfactorio; desgraciadamente el resultado final termina siendo decepcionante, tanto en sus aspectos técnicos como en la entrega final del producto. Mi principal problema con la película fue la carencia de buenos diálogos e incluso en muchos momentos el ritmo de la película en si. Entre chistes que no conectan, lineas realmente incomodas y un desarrollo de la historia un tanto absurdo, el guión es uno de los problemas mínimos con los que se encuentra esta película.

Las actuaciones dejan mucho que desear, al igual que sus personajes y el desarrollo de los mismos. Ni siquiera la participación de Sammuel L. Jackson como sidekick del héroe logra salvar la marea de momentos aburridos e inconclusos. Si bien Alexander Skarsgard y Margot Robbie no hacen un mal trabajo, otros aspectos de la película logran arruinar completamente cualquier esfuerzo que los dos protagonistas hayan puesto sobre la mesa.

Finalmente la película cuenta con varias escenas de acción donde nuevamente la premisa es buena pero la entrega sigue siendo precaria. Con algún CGI un poco abrumador y severos problemas de iluminación, el trabajo de David Yates (quien nos dio las ultimas 4 entregas de la saga Harry Potter) se ve bastante embarrado y baja bastante la barra de expectativas de un director que viene de trabajar en tan emblemática saga de películas.