La jugada maestra

Crítica de Julián Brennan - Cinergia

La partida del siglo

Estados Unidos, Rusia ,capitalismo ,comunismo ,una guerra , ningún arma, muchas amenazas, una competencia deportiva interminable, un peón, una reina, un rey, un yankee, un rojo, Bobby, Boris, un juego y la locura. Una guerra de percepciones.
Edward Zwick, el director de El último Samurái (The Last Samurai, 2003) y Diamante de sangre (Blood Diamond, 2006) dirige esta película que relata la historia de Bobby Fischer, el mejor jugador de ajedrez de todos los tiempos, el cual vivió su vida sintiéndose paranoico y perseguido por la URSS, por su fuerte actividad deportiva durante la Guerra Fría.
El film cumple con creces lo que propone y logra una gran atención de parte del público. Con pequeños toques de comedia, un soundtrack muy sesentoso y una gran actuación de todo su elenco logra contar una historia que refleja el clima sociopolítico y deportivo del mundo que vivió Fischer durante esos años.

Tobey Maguire
Se ve que cuando Tobey no hace de Spider-Man, le sale el buen actor de adentro y nos da una performance de alta calidad. Interpreta un Bobby Fischer paranoico y sumamente engreído, el cual se le podría haber ido de las manos y terminar siendo exagerado, pero no, maneja bien el personaje y sorprende gratamente.

Liev Schreiber
Este gran actor de origen alemán da vida a Boris Spassky, el gran contrincante contemporáneo de Fischer. De su actuación se puede elogiar la gran fluidez del idioma ruso de parte de Schreiber y esa paranoia que de apoco empezaba a parecer en Spassky.