La gran aventura LEGO 2

Crítica de Martín Goniondzki - Cuatro Bastardos

La gran aventura LEGO 2: Todo continúa siendo Increíble.
La primera película de “La Gran Aventura de Lego” (2014) resultó ser una grata sorpresa dentro del universo de los films animados. Ahora, cinco años después nos llega su secuela, y si bien ya estamos familiarizados con el concepto, esta continuación sigue siendo fresca y atractiva.
Seamos honestos, cuando se anunció la primera parte nos parecía muy remota la idea de que la obra sea tan atractiva y disfrutable como terminó siendo. No obstante, Warner Bros. había hecho los deberes al contratar al dúo de directores y guionistas más creativos e innovadores del momento, Phil Lord y Christopher Miller, quienes habían demostrado su talento para la comedia y la animación con películas como “21 Jump Street” (2012) y “Cloudy With a Chance of Meatballs” (2009). Así es como llevaron un producto que se veía como meramente comercial a ser una exitosa aventura para niños y grandes en un clásico enfrentamiento entre el bien y el mal, pero con un trasfondo sobre la familia bastante conveniente y valioso para el relato. Como era de esperar, tras el tremendo éxito del largometraje anterior, no tardó en confirmarse la secuela que nos terminó llegando cinco años después de la obra original. En esta oportunidad, Lord y Miller participaron en la escritura del guion pero esta vez la dirección cayó en manos de Mike Mitchell (“Trolls”, “Shrek Forever After”), algo que de todas formas no empañó ni comprometió el resultado final donde todavía se nota el sello de los iniciadores de la saga.
La cinta se ubica temporalmente cinco años después de los acontecimientos vistos en “The Lego Movie”, donde tras la calma reinante en la ciudad de Bricksburg conseguida tras la derrota del malvado Lord Business (Will Ferrell), aparece una nueva amenaza: invasores de LEGO DUPLO del espacio exterior que lo destrozan todo antes de que dé tiempo a reconstruirlo. Emmet, Lucy, Batman y sus amigos unirán fuerzas para librar una batalla que los llevará a mundos inexplorados.
Bajo esta simple premisa se erige esta secuela que busca (y logra) todo lo que una continuación digna debería otorgar: elevar la apuesta y dar más de todo. Si bien no se distancia demasiado de la original y repite algunos de sus mecanismos y recursos, sí consigue establecerse y adquirir una identidad propia. Es así que con todos sus elementos de metalenguaje y la dinámica de la comedia, produce una catarata de gags constante que muchas veces evita los lugares comunes de este tipo de films, causando sorpresa en el espectador y momentos sumamente hilarantes. Quizás en esta oportunidad nos falte la sorpresa que causó el capítulo inicial, pero rápidamente la audiencia se olvidará de estos detalles gracias a un ritmo frenético desde el comienzo hasta la segunda mitad (probablemente en la recta final pierda un poco de impulso), una animación impecable que manifiesta toda la inventiva y ensueño de Lego por medio de efectos visuales sorprendentes y una paleta de colores estridentes que llamarán la atención de los más pequeños.
Por otro lado, la banda sonora posiblemente sea incluso más pegadiza, funcional y creativa que la anterior, haciendo que uno continúe cantando los temas luego del visionado y que también se quede a ver los créditos para escuchar ese alegre y autoconsciente último tema musical.
Este largometraje se asemeja mucho a lo que fue “Deadpool 2” (2018) para su parte original. Está presente esa sensación de Déjà Vu y falta de sorpresa, pero sin embargo, los personajes, el contexto y todo lo demás sigue funcionando a pesar de la sensación de falta de innovación.
Otro punto a destacar tiene que ver con el trasfondo que se le quiso dar a la película en esta oportunidad. Aquí continúa la importancia de la familia pero esta vez se hace hincapié entre el vínculo de hermanos y no de la relación padre-hijo que veíamos anteriormente. La importancia del disfrute y la camaradería entre hermanos es el motor de esta segunda aventura cuya trama será desarrollada por la mixtura de imaginaciones de los personajes de Finn (Jadon Sand) y Bianca (Brooklynn Prince), los hijos de los personajes de Will Ferrell y Maya Rudolph. También se tocará el tema del crecimiento y la ruptura de ciertos rituales que involucran la parte lúdica de la infancia/preadolescencia.
En síntesis, “The Lego Movie 2: The Second Part” (título original) es un digno entretenimiento para toda la familia que si bien puede parecerse bastante a su precedente, funciona gracias a la magnífica animación, al diseño de los personajes y al increíble elenco que presta sus voces a los personajes, entre ellos: Chris Pratt, Elizabeth Banks, Will Arnett, Tiffany Haddish, Stephanie Beatriz, Alison Brie, Nick Offerman, Charlie Day, Channing Tatum, Jonah Hill, Jason Momoa, Cobie Smulders, Ralph Fiennes, Will Forte, Jorma Taccone y Bruce Willis. Una película que disfrutarán grandes y chicos por igual.