La gente del río

Crítica de Luciano Mezher - Visión del cine

Continua en el Cine Gaumont la proyección del documental La gente del Río de Martin Benchimol y Pablo Aparo.
Ernestina es un pequeño pueblo de 150 habitantes, escenario de este documental con la tensión y suspense de un film de ficción.

Los personajes extraños que viven en el pueblo nos introducen en los hechos vandálicos que produce la gente que visita el río. Actualmente los vecinos instalaron seguridad privada y al parecer esto acabó con el problema. Sin embargo, mientras los documentalistas estan rodando la película suceden nuevos hechos extraños. ¿Qué sucede realmente en Ernestina?

La película nos invita a introducirnos con humor en el mundo extraño de este pueblo, las vidas particulares de sus habitantes y la incógnita que despierta las diversas historias sobre La gente del río.

En tono de registro documental, la historia sitúa el punto de vista en los habitantes de este pueblo, con relatos que son parte del folclore del lugar, rodeados por una constante amenaza por parte de la gente del rió.

Estos fantasmas de un pueblo olvidado cuentan los mismos sucesos de manera diferente, en forma de poesía, anécdota de bar, chusmerio entre vecinos o grandes hazañas de unos pocos.

Cada uno de estos individuos es el reflejo mismo que caracteriza cualquier pueblo que el espectador haya visitado o conocido.

El quiebre de esta tranquilidad sucede al final de la historia. Los directores usan un evento como si se tratara del clímax de un relato de ficción.