La familia Monster

Crítica de Santiago Balestra - Alta Peli

El cine de animación habitualmente tiene por destinatario a un público infantil. No obstante, y durante los últimos 20 años por lo menos,crítica de la familia monster el éxito conseguido por el estudio Pixar ha obligado a las productoras de animación, tanto grandes como pequeñas, a mejorar su juego. Por ello debemos entender: una historia tan sólida sobre la que se apoye el avance tecnológico. Lamentablemente, no podemos decir que La Familia Monster sea un paso adelante en ese aspecto. Al menos no desde el aspecto narrativo.

La familia unida (atada con alambre):
La familia Wishbone no es lo que se dice feliz: el padre es un adicto al trabajo, mientras que los hermanos no dejan de pelear. La madre, en un intento de unir a la familia, propone ir a una fiesta de disfraces y cada uno de los miembros se viste como un monstruo clásico (Frankenstein, Mujer Vampiro, La Momia y el Hombre Lobo). Las cosas se complicarán cuando una bruja los transforme en los personajes de los que se están disfrazando, y deban colaborar juntos para buscar una manera de revertir el hechizo.

La parte visual de La Familia Monster es impecable. La animación es dinámica, mientras que el diseño de arte y de personajes se prueba de una gran riqueza en cada plano por su uso de la composición de cuadro, el color y las texturas. Todo esto apoyado por una iluminación muy cuidada en materia de fotorealismo. Puedo decir sin exagerar que es, únicamente desde el punto de vista técnico, uno de los mejores trabajos de animación que he visto en el año.

El trabajo de voces, por lo menos en la versión doblada, es efectivo. Da curiosidad saber cómo habrá sido la versión en inglés que contó con las voces de Emily Watson, Nick Frost y Jason Isaacs como el Dracula que oficia de antagonista de la historia.

Desgraciadamente estos logros sobresalientes en lo artístico y técnico son inversamente proporcionales a la calidad del guion. Este padece de una senda gama de defectos desde el primer minuto que empieza su recorrido. Estamos hablando de una narración con un ritmo tedioso, incoherente en las acciones de sus personajes, forzada en la manera que introduce y desarrolla las escenas, edulcorada exageradamente, carente de subtexto alguno, derivativa y sin gracia.

Hablando de este último detalle, debe decirse que la película hace a menudo un uso del humor escatológico (dentro de los limites infantiles, desde luego) que después de cierta cantidad de utilizaciones, ni a un niño le causarían gracia.

Conclusión:
La Familia Monster no consigue ir más allá de ser una notable proeza técnica en materia animación. Por desgracia, su historia y sus personajes están tan descuidados en su desarrollo que le va a resultar muy difícil suscitar una conexión con el espectador. Para los adultos acompañantes es una causa perdida desde el vamos. A lo mejor con la platea infantil puede tener mejor suerte, pero no tendría tantas esperanzas.