La conferencia

Crítica de Francisco Mendes Moas - Cine Argentino Hoy

Tras su paso por el festival de cine alemán y luego de recibir el galardón a mejor película en el festival de Barcelona, se estrena el día de hoy “La conferencia”. La película, de origen alemán, de Matti Geschonneck llega a varias salas del país. Buscando mostrar los hilos detrás de las decisiones tomadas por los nazis durante la segunda guerra mundial.

Lo que se conoce como la Conferencia de Wannsee, transcurrió el 20 de enero de 1942 en una villa de Berlín-Wannsee. Durante este evento los altos jerarcas del régimen nazi se juntaron para dilucidar lo que ellos denominaron: “La solución final para los judíos”. Una mesa, de poco mas de 10 personas, organizo todo los respectivo al Holocausto, el asesinato sistemático de 11 millones de judíos.

Difícilmente exista espectador al que esta película le pueda dejar indiferente. El audiovisual se plantea con un convencionalismo absoluto a nivel técnico, lo cual podría acarrear alguna queja o exigencia en pos de la innovación. Empero, esto no hace más que exaltar la frialdad y falta de humanidad de las personas encargadas de crear uno de los genocidios más grandes del mundo. Personajes y cámara se plantean tan fijos como estoicos al momento de narrar, lo cual llega a helar la sangre.

Es por este motivo que el peso de la narrativa se encuentra en la palabra. Toda información pasa por el texto, lo cual deriva en muchas ocasiones en eternos planos/contra-planos. Y si bien el objetivo queda claro, no deja de ser agobiante tras un sin fin de repeticiones. Sumado esto a lo aterrador de la temática, se genera una incomodidad constante funcionada con espanto e indignación.

No es fácil representar un evento histórico de manera interesante en el plano audiovisual. Mucho menos si se trata de una reunión administrativa, una conferencia. De todas formas, el audiovisual de Matti Geschonneck se convierte en una experiencia atrapante. “La conferencia”, hace foco en uno de los momentos más oscuros de la historia, haciendo que sea imposible quitar los ojos de la pantalla.