La chica danesa

Crítica de Paula Caffaro - CineramaPlus+

A PESAR DEL CUERPO

Basada en la verdadera historia de los artistas daneses Lili Elbe (ex Einar Wegener) y Gerda Wegener , La chica danesa, es un filme de ficción que narra la vanguardista y peligrosa idea del cambio de sexo. Ambientada en una Copenhague aristocrática de principio de los años veinte, el filme recrea el duro pasaje que deberá transitar el cuerpo y la personalidad de un individuo que se siente atrapado en el cuerpo equivocado, a través de la intimidad de la vida en pareja, y el profundo amor que se transforma o no se corresponde.

Gerda (Alicia Vikander) ama a Einar (Eddie Redmayne), pero Einar transita un periodo de transformación radical que se ve acelerado por la sorpresiva idea que le propone su esposa al pedirle que pose para ella vestido de mujer a causa de la ausencia de una modelo. Es entonces que lo que comienza por un juego de seducción termina por desencadenar de forma definitiva los verdaderos sentimientos de Einar.

Desde el punto de vista de Gerda, el recorrido temático de La chica danesa se centra, principalmente, en la historia de amor de esta pareja de artistas exitosos que se ve afectada por el proceso que sufre el cuerpo de Einar, quién a la vez que se va deshaciendo de todos sus hábitos y atuendos masculinos, y comienza a perder el deseo sexual por Gerda, su esposa. Pero el amor no se termina, el amor muta como el cuerpo y lo que explora el filme es justamente ese duro peregrinar en el cual el amor deberá transformarse a la par de los cambios físicos. ¿Podrá Gerda sostener esta nueva situación?

En el año 2012 el realizador canadiense Xavier Dolan intentó responder la misma pregunta cuando estrenó Laurence Anyways, una película que desde su título ya propone un link con el filme que nos ocupa. Laurence a pesar de todo; ¿a pesar de qué? A pesar de que Laurence es un hombre que vive con su novia Fred hace más de diez años, pero con el cambio de década (en su propia cronología – de los 20 a los 30- y también en la del mundo – de los ’80 a los ’90) comienza a sentir la necesidad de transformarse en mujer.

Emparentadas las dos películas en su temática de “¿podrá continuar el amor?”, la diferencia es, además de la época, la transgresión de La chica danesa al contar la historia de la primera operación de reasignación de sexo. Entonces, mientras que Laurence sólo desea sentirse mujer, Einar haría cualquier cosa por ser una mujer. De todos modos, lo importante es el relato personal y sentimental de dos parejas que ven sus relaciones mutar más allá de sus propias voluntades.

Con un Redmayne naturalmente femenino y una Vikander arrolladora, el filme seduce por su relato simple pero contundente, y una fotografía nórdica que representa la belleza cromática y paisajística de una sociedad burguesa que parece no tener demasiados prejuicios.

Por Paula Caffaro
@paula_caffaro