La chancha

Crítica de Catalina Dlugi - El portal de Catalina

¿Se puede filmar el peor dolor de una infancia lejana y entender el deseo de matar? En esta profunda, terrible y a la vez bella película están las respuestas. Para eso el director y guionista Franco Verdoia imaginó un encuentro casual entre los protagonistas de un hecho atroz ocurrido en el pasado, con las heridas intactas, y con esa situación, que el mismo define como un relato biográfico y personal, vuelto ficción, armó un film impactante, duro. Pero a la vez todo lo que sucede es capaz de albergar  los matices de un hecho traumático. Un lugar de vacaciones, un cruce casual para descubrir la profundidad de lo tapado con años de supuesta indiferencia, con tiempo que nunca reparó nada. Eligio además a muy buenos actores. Esteban Meloni en uno de sus mejores trabajos, con una entrega y una progresión dramática bien lograda, le saca el jugo al personaje. Gabriel Goity acierta con el tono siniestro, los pequeños gestos, las miradas. También es muy bueno el desempeño de Gladys Florimonte lejos del registro cómico y el aporte de Raquel Karro y Rodrigo Silveira. Un film redondo que lleva al espectador por todas la emociones, por la dimensión de cada sentimiento y se redondea de buena manera.