La carrera de Brittany

Crítica de Isabel Croce - La Prensa

Esta divertida comedia norteamericana recuerda en sus primeras secuencias a un éxito británico del 2001, cuando conocimos a Renée Zellweger y "El diario de Bridget Jones". Brittany tiene mucho que ver con la Bridget que escribió el diario. Las dos están excedidas de peso, las dos son un fracaso en lo sentimental, y para completar, en sus noches se entretienen con la TV, el cigarrillo y el alcohol (Bridget), mientras que Brittany se motiva con el Tinder, aunque nunca se anime a formar parte de él, mientras el vino y alguna que otra pastilla le anima la vida. En síntesis, ni una ni otra se conocen verdaderamente y menos llegan a quererse.

Pero a Brittany su encuentro con un médico le cambiará la vida. El quiere que ella haga una vida saludable, sin pastillas ni falsas expectativas, y poco a poco las caminatas y la idea de intervenir en la popular Maratón de Nueva York comienzan a mostrarle un camino de salvataje. Las peripecias y la gente que obstaculizan o benefician la carrera de Brittany enriquecen la trama con sus divertidas personalidades: un compañero de trabajo indio, su familia que la alienta a la distancia o la millonaria en tren de divorcio que aparece para ayudarla como en un cuento de hadas.

POR UNO MISMO
"La carrera de Brittany" es la clásica lucha que uno tiene con sus demonios y con el entorno, pero que a pesar de los problemas o a causa de ellos solidifican la autoestima y permiten, con una dosis de energía personal, crecer.

Nada volverá a ser igual desde el momento en que Brittany se proponga bajar unos kilos y logre hacer su primera cuadra en running sostenido y sudoroso. El solo hecho de dar el primer paso le señala el camino correcto. Lo demás serán momentos olvidables de cualquier vida o recordables para siempre. Momentos marcados en pantalla por las estaciones en que se desarrolla la trama.

Un filme cálido, entretenido, con buenos actores y una actriz ideal para el papel de Brittany, Jillian Bell, con experiencia en clubs de comedia y televisión. Divertida, con buen ritmo y mayores logros en la primera parte que en la segunda, "La carrera de Brittany" muestra el suficiente optimismo y amplitud temática que permite que cada uno vea más allá del problema de la gordura y la baja estima, sus propias limitaciones.