La biblioteca de los libros olvidados

Crítica de Isabel Croce - La Prensa

Jean Michel Rouche es un capo televisivo de la crítica literaria, aunque según algunos detractores, últimamente sólo lee las solapas de los libros y los exalta o destruye según su ánimo. Ahora le llega un best seller, "Ultimas horas de una historia de amor", traducido a distintos idiomas y consagrado por un público internacional. El asunto es que su autor, muerto hace poco, es un pizzero de la Bretaña que jamás escribió nada y cuya familia nunca supo que él se dedicaba a la literatura. Como pocas veces, durante su exitoso programa televisivo, ante su invitada, la esposa del pizzero y nuevo literato Henri Pick, Rouche se lanza contra el escritor dudando de la autoría del libro.

El escándalo se desata, Rouche pierde el trabajo y el crédito, pero sin darse por vencido, emprende un viaje en la búsqueda del misterioso autor de la obra. Insólitamente, su compañera de viaje será la hija del pizzero, amante de la literatura y que de manera secreta duda de la condición literaria de su padre.

VIAJE LITERARIO

El filme de Rémi Bezanson, estupendamente narrado, siempre dentro de la línea tradicional, se convierte en un atractivo viaje literario-policial que permite conocer más sobre los pormenores de la industria editorial, plagada de campañas de marketing que priorizan lo ajeno a la calidad del producto.

Con un envidiable humor, "La biblioteca de los libros olvidados" se mete en intimidades del mundo literario, desmenuza las consecuencias de un "boom editorial", la impunidad de una editora en busca de un éxito y hasta se mete en un particular Club del Libro de un rincón de la Bretaña, donde sus integrantes parecen más interesadas en los instrumentos usados por los asesinos literarios antes que por la riqueza de las metáforas (divertida alusión a otra curiosidad literaria, la del Club Joyce que hace más de treinta años, con sus escasos adictos, obstinadamente lee una y otra vez la "Finnegan"s Wake" de ese autor, en la tarea de buscar significados nuevos a una obra compleja).

El filme de Bezancon tiene a un impecable Fabrice Luchini como intérprete. El actor de "Emma Bovary" y su estilo elegante y humor ácido permiten incursionar en el mundo de la literatura con otra curiosidad. Basado en el best seller del norteamericano David Foenkinos, la historia se basó en un libro del autor beat Richard Gary Brautigan y la Biblioteca de Libros Olvidados, creada en su honor, sobrevive en la ciudad de Vancouver. Una perlita adicional: la participación en el filme en un personaje breve pero importante de la musa de Fassbinder, Hanna Schygulla.