Krampus

Crítica de Magali Spilere - El Lado G

Una escalofriante historia de navidad llega a los cines de la mano del demonio más temido de las fiestas europeas: Krampus.

Krampus es una película de terror ambientada en la fiesta más alegre del año: Navidad. La dirección estuvo a cargo de Michael Dougherty, guionista de X-Men: Apocalipsis, cuyo estreno está programado para 2016, mente detrás de Trick ‘r Treat (2007), la cual fue muy bien recibida por el público. En esta oportunidad, Dougherty escribió una historia de horror que se basa en la la leyenda alpina de Santa Claus y su sombra maligna, pero que no utiliza el recurso de found footage (técnica narrativa en primera persona donde los propios personajes son los que se encuentran filmando la historia) para poder retratarla.

En víspera de Noche Buena, una familia dispareja se reúne para celebrar como todos los años, pero las diferencias entre ellos harán que la fiesta sea un completo caos. Desilusionado por todo lo ocurrido, el más pequeño de la familia, Max, abandona todas las esperanzas que tiene sobre la Navidad y hace pedazos sus deseos para sus parientes. Al hacerlo, un espíritu maligno de la festividad desatará una pesadilla a su alrededor con el fin de castigar a los no creyentes. Con la ayuda de malévolos juguetes, duendes y demonios, Krampus, la sombra de Santa Claus, intentará arruinar la Navidad de esta familia y de todo aquel que abandone la esperanza de dicha celebración.

La leyenda ya había sido adaptada en programas de televisión norteamericanos, pero el resultado de esta nueva propuesta es original y fresco. La historia rompe con el tradicional planteo alrededor de las películas navideñas, y da mucho más de lo que propone. La intriga y el suspenso están presentes durante toda la trama, a pesar de que Krampus cuenta con guiños humorísticos que sacan de atmósfera al espectador.

Dougherty ofrece una versión de la historia con una dosis de humor y otra de terror, lo justo y necesario para que no se la compare con otras adaptaciones. Al igual que en Trick ‘r Treat, el protagonista es un niño que tendrá que cargar con la consecuencia de sus acciones hasta el final del film.

Las actuaciones no son relucientes pero son correctas. Los padres heroícos son encarnados por Adam Scott y Toni Collete y no aportan nada alucinante. Krista Stadler se lleva la atención por su misterioso personaje y la historia que oculta junto al pequeño Max, interpretado por Emjay Anthony, que cumple con su papel pero le queda grande el puesto de protagonista. Conchata Ferrell como la tía alcohólica rompe con el clima de suspenso y resulta divertida.

Krampus ofrece una alternativa para escapar de las tradicionales historias navideñas al presentar a este demonio europeo que trae el horror necesario para pasar el rato, pero no para perdurar en el tiempo.