Kick-Ass

Crítica de Julieta Paladino - Fancinema

¿Quién quiere ser superhéroe?

Toma una historieta, busca un elenco de actores famosos (o sólo un par), agrégales escenas de acción, efectos especiales y chistes sobre otras películas, mezcla todo esto con una estética muy juvenil y algunos hits musicales del momento: ¡tendrás así tu propia película de superhéroes!

Las remakes y las películas de superhéroes parecen no pasar aún de moda, quizás porque siguen tratando de reinventar el género (¡en algunos casos lo logran extraordinariamente bien! como en Batman: the dark knight) pero, salvo excepciones, el modelo parece ser siempre el mismo y logran ser films a veces entretenidos pero sin nada nuevo que contar. El caso de Kick-Ass es algo particular. Cuenta la historia de Dave Lizewsky, el típico adolescente virgen al que las mujeres ignoran y los chicos toman el pelo, que un día decide convertirse en un superhéroe (Kick-Ass) usando un ridículo traje verde que manda a pedir por Internet. Sin poderes especiales, fuerza o armas recibirá más de una paliza hasta que su historia se complicará (o se volverá quizás más interesante) mezclándose con los planes de un villano mafioso de su ciudad (Frank D’Amico) y de otros superhéroes: Hitgirl (una enfant terrible entrenada para matar despiadadamente) y su padre.

Esta adaptación cinematográfica de la historieta homónima de Mark Millar posee además una estética muy cuidada, sobre todo en lo que respecta a la simetría y a la decoración “setentosa” (saturada de color naranja y blanco) de la casa del villano que, junto a la utilización de música clásica a todo volumen en momentos de gran violencia, recuerdan a La naranja mecánica de Stanley Kubrick. Esta y muchas otras referencias cinematográficas son explícitas: vemos desfilar ante nuestros ojos escenas de Tomb rider, de Wanted (también basada en una historieta de Millar), de Scarface, del videojuego Doom, del comic y la película Watchmen (sobre todo en el diseño de los trajes cuadrados y poco estilizados de los superhéroes) o del western For a few dollars more con música de Ennio Morricone. Internet y las telefonías celulares estarán también presentes y ni hablar de las redes sociales y de YouTube que adquieren protagonismo en el desenlace de la historia. Todos estos elementos combinados con una banda sonora muy buena la vuelven una película entretenida, muy juvenil y moderna, con buenas dosis de violencia, aunque con personajes un poco trillados y una historia bastante predecible. Es perfecta para una fría noche de domingo, para simplemente pasar un rato de diversión.