Balada de un hombre común

Crítica de Martín Torres - Fuera de campo

Si buscamos la palabra "autor" en el diccionario encontraremos una definición detallada de un vocablo que si no tenemos en nuestro vocabulario cotidiano probablemente no estamos leyendo lo suficiente. Después de todo no es una palabra muy difícil ni hace falta ser demasiado erudito para utilizarla. La Real Academia Española por ejemplo tiene entre sus definiciones la siguiente: Persona que ha hecho alguna obra científica, literaria o artística. Pero por supuesto que existen otras acepciones de la palabra. El autor de un crimen no es exactamente un científico, un literato o un artista. Y de pronto autor puede desviar por completo el significado con el que aquí intentamos dar. Por suerte, sin realizar demasiado esfuerzo, la misma página que esboza estas definiciones tiene inmediatamente debajo la definición de "cine de autor". Y aquí sí finalmente damos con algo pertinente a la nueva película de los hermanos Coen. Simplificando, el cine de autor cuenta con realizadores que son capaces de imprimir un estilo propio en su obra. Inside Llewyn Davis (aquí traducida como Balada de un hombre común) puede no ser su film más emblemático ni magnífico, pero aun así es una hermosa pieza cinematográfica salida del imaginario de dos de los autores más talentosos de la historia del cine.

Balada de un hombre común propone una suerte de mirada escéptica sobre el submundo de la escena folk americana de los años sesenta. Llewyn, el protagonista de esta historia personifica el sueño americano de un músico independiente que aspira llegar a ser alguien a través de su triste y melancólica música. Inspirada libremente en la vida de Dave Van Ronk, uno de los muchos músicos que presuntamente inspiraron al mismo Bob Dylan (a quien los Coen guardan un pequeño homenaje en su cinta) esta suerte de falsa biopic se alza como un viaje completamente antiépico que desde el comienzo sabemos está destinado a fracasar. Y no es que Llewyn carezca de talento, sino que simplemente los productores "no ven dinero en eso". Pero aun así, nosotros, espectadores desde la butaca o la comodidad del hogar, no podemos más que reverenciar la hermosa música que se desprende del film cortesía de la propia interpretación del talentoso actor protagonista Oscar Isaac, la producción de T-Bone Burnett y la colaboración del líder de la banda Mumford and Sons, Marcus Mumford. Y además la armoniosa composición musical está acompañada de una hermosa fotografía propuesta por Bruno Delbonnel quien en esta oportunidad tuvo la dura tarea de reemplazar al favorito de Joel e Ethan Coen, Roger Deakins.

Abundan en el film las típicas situaciones tragicómicas comunes a las historias de los Coen y nuevamente se da cabida al simbolismo típico que las caracteriza. Los gatos por ejemplo, son animales que podremos encontrar en casi todas sus películas. Y en esta oportunidad el gato Ulises se transforma en uno de los protagonistas aportando un paralelismo para con el mismo Llewyn que lo arrastra por los rincones más recónditos y gélidos de la música folk. Pero Ulises pertenece a una familia "bien" que vive en la parte más noble de la ciudad, representando quizás aquello a lo que Llewyn nunca podrá llegar (o a lo que quizás ni siquiera quiere llegar). Mientras que el otro gato callejero al que Llewyn confunde con Ulises se transforma en una visión muy distinta y mucho más próxima a su realidad. Hace falta ver el film para advertir cómo no por casualidad la suerte de ambos traza un camino similar.

El primer impacto que puede generar la cinta probablemente sea mucho más superficial que la profundidad real de la película. Como en la mayoría de sus films, la primera visualización puede resultar mucho más mundana de lo que realmente es, logrando así cautivarnos con deleites y placeres simples como una bonita puesta en escena y una atractiva propuesta musical. Pero para aquellos que incursionan en estos dos realizadores por primera vez, la humilde sugerencia desde este lado del monitor es que se interioricen más en su cine y completen el proceso de apreciación de esta película leyendo varias de las interpretaciones que se pueden encontrar en diarios, revistas y páginas de internet.