Il solengo

Crítica de María Laura Paz - El Espectador Avezado

Il Solengo
El valle de Pratolongo es escenario para la reconstrucción de un mito, el de Mario de Marcella. Este hombre, que por alguna razón, que se intenta explicar, un día se fue a vivir aislado de su comunidad, acompañado de la naturaleza y sus peligros. Esa misma comunidad hoy cuenta lo que se decía de él, de su modo de vida y que casi siempre que algo pasaba y era algo grave, la culpa recaia sobre "Mario de Marcella".
Los protagonistas varios de este documental en ritmo de varios planos secuencia sobre la cueva donde se decía vivió, ¿vive? el ermintaño, son todos hombres mayores. Todos ellos lo vieron alguna vez, se cruzaron con ese extraño conocido, todos ellos tienen algo de Mario y eso es lo interesante.
No va a tener un público que arrase la taquilla pero si se meten en sus pequeños detalles y grandes personajes que hacen al avance del metraje codirigido por Alessio Rigo de Righi y Matteo Zoppis, podrán disfrutar una placentera experiencia cinematográfica.
Me asombró que la peli tenga algo de Argentina, no sé bien qué, parece que algún aporte financiero o recursos humanos, ya que aparece junto con Italia en la producción.
Fue la ganadora del premio de la ciudad de Torino, en ese mismo festival como mejor documental.
No es un docudrama y al mismo tiempo lo es. Es raro que no haya jóvenes, que no haya mujeres (aunque se hable de una de ellas en especial, la madre de Mario, Marcella). Hay recuerdos y hay acuerdos, la vida en Pratolongo evolucionó, más los pocos habitantes que quedan por alguna razón en especial, se quedaron en el tiempo en que Mario de Marcella era el centro de las habladurías. Hoy, en ese lugar siguen pasando las mismas cosas, y un fantasma agita el paisaje y el clima de las distintas estaciones. La cueva y hogar de Mario, sigue imperturbable.
Un filme contado como un cuento en las voces de sus protagonistas. Lo recomiendo con las salvedades que planteé anteriormente. Si son de los fans de la acción, el romance u otro género, abstenerse.