I nostri giorni

Crítica de Catalina Dlugi - El portal de Catalina

Gisella Paz eligió para investigar sus raíces culturales, pobladas de nostalgias de sus mayores, recorrer Italia y mostrar los trabajos y los días de hombres y mujeres que muestran sus rutinas, sus convicciones, sus habilidades y sus tradiciones. Así conocernos a un colectivo de inmigrantes africanos que fabrican yogurt casero y cultivan verduras orgánicas; una fábrica recuperada de autopartes; un hombre orgulloso de su carnicería y la relación con sus vecinos, clientes y proveedores; un taller de cerámica familiar; un peluquera a domicilio y sus clientas adultas mayores; un viñedo en el momento de la cosecha; una fábrica de zapatos; un atelier de costura artesanal de prodigiosos resultados; un tallador de madera; un escultor de piedras y sus creaciones. La directora resolvió de  manera inteligente como mostrar a una sociedad, a mitad de camino entre producciones en cadena  conviviendo con artesanos y trabajadores manuales que sostienen sus labores conviviendo en una sociedad de raíces culturales complejas. El esfuerzo individual, familiar y colectivo,   presencia de la tradición, la manera de afrontar una realidad adversa, el orgullo del saber y la creación. Una muestra curiosa y fascinante a la vez.