Horas desesperadas

Crítica de Juan P. Pugliese - EscribiendoCine

Contrarreloj

En Horas desesperadas (Hours, 2013), Paul Walker demostró que era un actor capaz de interpretar a personajes que salieran del prototipo del cine de acción y darle vida a un tipo común y corriente que se ve desbordado por una situación extraordinaria.

Nolan Hayes ingresa a un hospital de Nueva Orleans con su esposa a punto de dar a luz. Minutos después, el médico le informa que su mujer ha muerto pero que ha nacido su hija. Ahora, la bebé debe permanecer en una especie de incubadora que le proporciona oxígeno para mantenerla con vida pero cuando el huracán Katrina haga sentir toda su fuerza, Nolan deberá hacer lo que sea para cuidar a su hija.

En uno de los últimos trabajos de Paul Walker queda claro que detrás del carilindo que caminaba de una forma un tanto peculiar en la saga de Rápidos y furiosos había un actor con talento que podía meterse en la piel de personajes corrientes que se ven envueltos en una situación que los llevan a traspasar cualquier límite para mantenerse a flote.

El huracán Katrina golpeó fuerte a los estadounidenses y esto también ha sido reflejado en el cine. En Un maldito policía en Nueva Orleans ((Bad Lieuteman, 2009) de Werner Herzog, Nicolas Cage era un policía un poquito corrupto que se involucraba con gente peligrosa con el trasfondo de una ciudad devastada. Si bien en Horas desesperadas la temática es diferente, el fenómeno climatológico está presente en toda la cinta con fragmentos de los noticieros que cubrieron la historia.

Horas desesperadas es un drama con elementos de thriller. Su director, Eric Heisserer (guionista de Pesadilla en Elm Street, Destino Final 5 y La cosa) logra mantener el suspenso pero, luego de la primera mitad del film, comienza a repetirse y termina ofreciendo una sucesión de escenas en las que el protagonista parece ser el tipo con más mala suerte en el mundo.

Todo el peso dramático de la narración recae sobre los hombros de Paul Walker y logra sorprender con una actuación a la altura de las circunstancias. Los instantes posteriores a la muerte de su esposa y el primer acercamiento con su hija devela una faceta poco conocida del actor.

Es inevitable que la película tome cierta relevancia por el trágico final de Paul Walker. Lo cierto es que es una cinta que pasa desapercibida pero, al mismo tiempo, deja ver una actuación distinta de lo que estábamos acostumbrados a ver en un actor que todavía no había dado la mejor actuación de su carrera.