High life

Crítica de Alina Spicoli - Estrelladas TV

La crueldad del ser humano

High Life (2018) es una película de ciencia ficción y horror dirigida y co-escrita por Claire Denis, siendo ésta su primera incursión en el género. Coproducida entre Estados Unidos, Polonia, Alemania, Francia y Reino Unido, el filme cuenta con los protagónicos de Robert Pattinson (Crepúsculo, Good Time) y Juliette Binoche (Clouds of Sils Maria). Completan el reparto Mia Goth (La Cura Siniestra, Suspiria), André Benjamin, Agata Buzek, Claire Tran, Ewan Mitchell, Lars Eidinger, entre otros. La cinta recibió el premio FIPRESCI de la crítica internacional en el Festival de San Sebastián y se presentó en la Selección Oficial del Festival Internacional de Cine de Toronto.

La trama gira en torno a Monte (Robert Pattinson), un individuo que forma parte de una tripulación espacial de criminales que está liderada por la doctora Dibs (Juliette Binoche). La misión consiste en meterse dentro de un agujero negro para conseguir la energía necesaria que beneficiará al resto de la humanidad. No obstante, en esos largos meses dentro de la nave las personas serán usadas como conejillos de indias para la experimentación genética y la inseminación artificial.

Completamente rara, fuerte y turbia, High Life transmite la sensación de que se está viendo algo indebido, prohibido y sucio. A su vez, el filme consigue que el espectador bajo ningún término quiera apartar la mirada de la pantalla. Con una iluminación que realza los planos rojizos y azulados, la película crea una atmósfera claustrofóbica en la que hasta la situación más inimaginable puede llegar a darse.

Sin contar con demasiadas explicaciones de lo que va ocurriendo, a la nueva cinta de Claire Denis no se le puede negar su originalidad. Combinar un viaje intergaláctico con tópicos tales como la ciencia, la violencia, el placer, la soledad y la autodestrucción era una apuesta demasiado audaz. Es por eso que esta mezcla convertida en película resulta muy difícil de recomendar. No apta para el público general, ni siquiera los que disfruten de la ciencia ficción tradicional se sentirán satisfechos ya que esta propuesta se toma sus propios tiempos y no está estructurada en una narrativa lineal.

Con un guión que utiliza varios términos incómodos y perturbadores, la película cuenta con notables actuaciones a pesar de que nunca llegamos a conocer en profundidad a los personajes. Juliette Binoche es protagonista de una secuencia sexual que será muy difícil de olvidar y Robert Pattinson continúa demostrando lo buen actor que es luego de su pasado vampírico. Además, la actriz británica Mia Goth reafirma que los filmes de suspenso y terror son lo suyo.

Tan visceral como atrapante, High Life puede interpretarse de varias maneras. La paternidad, el rol de la mujer y el creerse lo suficientemente superior como para decidir por sobre otro ser humano se hacen presentes en esta película que, en especial, retrata la crueldad más salvaje que habita dentro nuestro.