Grandes héroes

Crítica de Iván Steinhardt - El rincón del cinéfilo

Cita imperdible para terminar el año con una sonrisa

Si en “Frozen: Una aventura congelada” (2013) la gran apuesta de Disney fue un revival del musical de Hollywood hecho y derecho, contextualizado en un cuento de hadas, el traslado hacia el humor y la aventura de “Grandes héroes” no deja otra cosa que un gran abanico de propuestas del cine de animación industrial. Dicho sea de paso, ya no hay con qué darle a 2014: Claramente uno de los mejores años en la historia del cine de animación.

¿Qué aporta “Grandes héroes” a todo lo que vimos desde enero a esta parte? En primer lugar, un gran homenaje al manga japonés, otro al cine clase “B” de monstruos en zonas portuarias, también a los cómics de superhéroes en función de la construcción del personaje principal y, por qué no, inmerso en ese mismo universo, a los Power Rangers y al animé, sin ser esto en tono paródico. Tal vez la intervención del grupo “Man of action” (los creadores de Ben 10) sobre cuyos personajes se basa éste estreno, explique un poco esta última parte.

En Sanfransokio (mezcla de San Francisco y Tokio) Hiro (Memo Aponte Jr., voz original de Ryan Potter) es un niño hiper inteligente. Un pequeño gran genio inventor en el campo de la robótica, que pasa los días entre la rebeldía propia de la edad y las peleas clandestinas entre robots operados a control remoto, una suerte de versión en miniatura de “Gigantes de acero” (2011]). Su hermano Tadashi (Alexis Ortega, voz original de Daniel Henney) lo salva de una golpiza y lo lleva esa misma noche a su lugar de trabajo. Un laboratorio de invenciones donde vemos por primera vez a Baymax (Alan Prieto, voz original de Scott Adsit), y el proyecto en el cual Tadashi ha estado trabajando. Algo así como un robot-enfermero (mezcla de muñeco de Michelin y el malvavisco gigante de “Los cazafantasmas”, 1984) diseñado para asistir heridos y ayudar a mejorar la salud. También conocemos a algunos amigos:. Honey Lemon (Génesis Rodríguez), Fred (Noé Velásquez, voz original de T. J. Miller), Go Go (Erika Ugalde, voz original de Jamie Chung), y finalmente Wasabi (Alan Bravo, voz original de Damon Wayans Jr.). Todos chicos cool y buena onda (cada uno con su particular invención); pese a reconocerse como nerds de la física, la cinética, la dinámica, etc.

Hiro se entusiasma mucho con la posibilidad de estudiar allí. Para hacerlo debe presentar una invención en la feria de admisión que organiza la empresa. El niño se aparece con una genialidad que se adivina tanto como un prodigio del futuro, como peligroso si cae en manos equivocadas. Luego de una tremenda explosión el dueño de la empresa y el hermano mueren. Hiro queda traumado y con sed de venganza.

“Grandes héroes”, sin proponérselo, se convierte en una aventura desopilante, no sólo por la cantidad de guiños para todo aquel fanático de las referencias anteriores, sino por una enorme entrega de humor que va desde lo insólito a lo clownesco, en especial con todo lo que hace Baymax. Cada movimiento parece ser producto de un minucioso estudio de técnicas circenses, pero además de un gran manejo de los silencios y del timing para la comedia. Baymax resulta el gran provocador de carcajadas a partir de presentarse como un sujeto extraño tratando de encontrarle lógica al mundo al cual despierta, y a las contradicciones humanas puestas a prueba a partir de los parámetros simples con los que está diseñado su sistema operativo y su mecánica.

Tal vez sin proponérselo los directores Don Hall y Chris Williams, autores de “La familia del futuro” (2007) y “Bolt: un perro fuera de serie” (2008), respectivamente, logran pasar varios mensajes en su película, empezando por la ponderación del estudio en función del anhelo de Hiro de querer pertenecer a ese grupo de inventores, siguiendo por la posibilidad de salir adelante frente a la adversidad si uno se deja contener por los amigos y, por cierto, el verdadero valor detrás de los actos heroicos. Todo enmarcado en una aventura llena de acción, con gran banda de sonido, merecedora de ser considerada para los próximos Oscar, y un sólido trabajo de doblaje, en especial de los protagónicos

“Grandes héroes” es una cita imperdible para terminar el año con una sonrisa

Por supuesto, hay una gran sorpresa al final de los créditos.