Graba

Crítica de Fernando Iannantuono - Cine crítico

Deambulando por Francia

Belén Blanco interpreta a una mujer atormentada por su pasado que encuentra refugio alquilando un cuarto en Francia. Allí se hospeda con su arrendatario un reciente divorciado con quien al pasar los días va a entablar lazos sentimentales cada vez más fuertes. Película demasiado medida y correcta cuya mayor preocupación es la de crear climas bien agobiantes. Sin embargo, con el correr del tiempo la trama se vuelve extremadamente repetitiva y sus resoluciones se hacen predecibles y muy comunes.
Sergio Mazza construye un ambiente simple pero complejo, donde los actores son los estandartes de la trama y la atmósfera cotidiana se hace angustiante. Blanco encarna a una mujer callada y solitaria que solo se dedica a subsistir, mientras Raux está devastado por la resiente ruptura y partida de su familia, en especial su hijo. Ambos están vulnerables y pronto notarán que se necesitan uno del otro. Aunque el clima es el indicado, incluso perfecto, hay una sensación de lugar común que recorre a toda la historia. Instancias normales de acciones lentas y pausadas retratadas a través de una cámara distante encierran una sensación de opresión, pero también de similitud con otras películas.

El problema de "Graba" radica en dos cuestiones fundamentales. La primera es la rareza de la experiencia en donde uno no puede evitar preguntarse por la razón de que haya una argentina indocumentada en París, lo cual se resuelve de forma insatisfactoria ya que a pesar de haber razones suficientes para haber escapado de su hogar, no las hay tanto para ir a un país que la rechaza. Mientras, la segunda radica en la ausencia de un relato verdaderamente relevante. Constantemente vemos a ambos protagonistas existir de forma apática con su entorno, lo cual dificulta terriblemente la identificación de un espectador que ya con el correr del tiempo le será complicado tener un genuino interés por el desenlace de los protagonistas. Incluso la repetición de escenas similares complica a un más su empatía.

Finalmente, aunque "Graba" resulte ser una película hecha con mucha eficacia, la historia va perdiendo el pulso y las emociones se vuelven cada vez más vacías de sentido.