Glass

Crítica de Jorge Marchisio - Loco x el Cine

Luego de que David Dunn logre rescatar a un grupo de chicas que iban a ser ofrecidas en sacrificio a La Bestia, tanto el apodado Centinela como Kevin Wendell Crumb son llevados a la misma instalación mental donde se encuentra Elijah “Mr. Glass” Price. En dicho lugar, serán tratados por la psiquiatra Ellie Staple, quien se propone demostrarles, que ninguno de ellos es en realidad un meta humano, y son solo personas normales y corrientes, con la realidad distorsionada.

Luego del enorme hype provocado por el final de Fragmentado, llega a nuestras salas Glass, la conclusión de este universo de superhéroes creado por uno de los directores más irregulares y poco confiables de Hollywood, M. Night Shyamalan.

Y debemos admitir, al menos en caso de quien les habla, que ir al cine tan expectante terminó jugando en contra, porque si bien Glass no es la mediocridad que dicen algunos, tampoco es una gran película, hasta podríamos decir que ni siquiera es buena.

Sin entrar en el terreno de los spoilers, tenemos que mencionar que estamos ante un film lento. De hecho, su narración recuerda bastante a El Protegido, donde paso a paso, se hacía una analogía sobre los superhéroes y qué pasaría si existieran en el mundo real; cuales serían sus ventajas y debilidades, y en que se exageraría con sus homónimos del comic. Y toda esta construcción, es lo mejor que ofrece Glass hasta…

Sí, por desgracia, y lo que muchos temían, sucede en esta película. El famoso giro  “a lo Shyamalan“ se hace presente, y no de buena forma como pasó con Fragmentado o la ya citada El Protegido, sino al más puro estilo El fin de los tiempos (esa donde Mark Wahlberg da la peor actuación de su vida). Así que todo lo que se venía construyendo a paso firme y de a poco, se derrumba por obra y gracia del propio director.

Por suerte para el relato, los actores principales están a la altura de lo que se esperaba. James McAvoy vuelve a dar una interpretación brillante al dar vida aun a más personalidades de Kevin, mientras que Bruce Willistranquilamente podría retirarse ahora, tras haber dado un buen trabajo después de tanta bazofia que venía haciendo.

Eso sí, personajes como el de Anya Taylor Joy se sienten como puro relleno, para que cada uno de los tres meta humanos tengan un personaje secundario que le haga backup a su historia personal. Lo mismo podría aplicarse a la madre de Mr. Glass.

Glass termina siendo una película correcta y ya. Demasiado poco para el hype que se tenía con el trailer visto en la Comic Con, pero a la vez, es una cachetada de realidad para el espectador. Nunca hay que confiar del todo en M. Night Shyamalan.